¿QUIÉN ES JESÚS?

La vida de Jesús siempre ha suscitado preguntas a lo largo de los últimos dos mil años.

¿Cómo pudo un carpintero que fue ejecutado por los romanos convertirse en el hombre más famoso de la historia?
¿Fue Jesús alguien verdaderamente real?
¿Cómo puede Dios ser un hombre al mismo tiempo?
¿De qué manera podría esto tener algún sentido para mi vida?

Estas son algunas preguntas, pero aquí tienes un espacio para formular las tuyas.
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domingo, 25 de marzo de 2018

REVOLUCIÓN Y CONTRA-REVOLUCIÓN VISTA POR TOLKIEN

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"Os digo que en esta hora terrible
en que el espíritu
 del mal busca 
todos los medios para destruir el Reino de Dios, 
debéis poner en acción todas las energías para defenderlo 
de las falsas ideologías de nuestro tiempo” 
(Papa Juan XXIII)

En otro artículo hablabamos sobre la alegoría cristiana y el simbolismo católico de "El Señor de los Anillos" (J.R.R. Tolkien), que narra la lucha entre el bien y el malla batalla por liberar a la Tiera Media de la tiranía del Señor Oscuro Sauron.  

Hoy volvemos a ello con el propósito de establecer un paralelismo con la Revolución y Contra-Revolución.

La Palabra de Dios (en la que Tolkien se inspiró para escribir su obra) nos habla de esta lucha encabezada por el Arcángel San
Miguel contra las huestes de Lucifer: "Y fue lanzado fuera el dragón, la serpiente antigua, que se llama Diablo y Satanás, el cual engaña al mundo entero, fue arrojado a la tierra y sus ángeles fueron arrojados con él" (Apocalipsis 12,9 ).

Satanás fue vencido, privado de cuerpo físico y arrojado a la tierra, la cual dirige y gobierna (1 Juan 5,19), con el propósito de tentar a la humanidad y hacer la guerra a los escogidos. (Isaías 14,12-15). 
      
Esta lucha continúa hoy, trasladada del cielo a la tierra. Sauron es la representación de Satanás en el mundo y su símbolo es el "El Ojo que todo lo ve".  Curiosamente, el ojo de la Masonería y de los Illuminati (también impresa en el billete de un dólar), es uno de los principales agentes de la Revolución.

La Revolución

Satanás, valiéndose de su "Revolucionario Anillo Único" (Igualitarismo y Liberalismo), trata de esclavizar al ser humano con el gran poder maligno que corrompe completamente al que intenta usarlo.
Es la búsqueda del Nuevo Orden Mundial, bajo el que ya no habrá diferencias, bajo el cual habrá una falsa libertad que oculta su verdadero objetivo: la total obediencia a Satanás (Sauron). 
La fuerza de atracción del "Anillo Único" (las falsas ideologías y las pasiones desordenadas) es total y no hay forma de escapar a ella. Otorgando invisibilidad a su portador, le hace prisionero del anillo y de su influjo demoníaco, haciéndole pagar una alto precio: la entrega de la misma alma. 

Su característica principal es la subyugar a todos sus portadores, atraerlos, para así, atarlos a todos bajo un poder único: "Un Anillo para gobernarlos a todos, un Anillo para encontrarlos, un Anillo para atraerlos a todos y atarlos en las tinieblas" (El Señor de los Anillos, JRR Tolkien).

El anillo del mal es seductor, tienta a quién lo posee hacia el egoísmo, la codicia, el odio, etc...es el símbolo del pecado.


El anillo domina a aquel que lo posee; conoce las debilidades de cada portador y así, logra esclavizarlo... manteniendo prisionero a aquel que lo utiliza: "Jesús les respondió: Os aseguro que quien comete pecado es un esclavo." ( Juan 8,34).

Cuando una persona usa el Anillo, éste se convierte en una adicción, en un "círculo" vicioso, en un "tesoro" (como le ocurrió a Smeágol), que lleva a una obsesión enfermiza.

Al principio, como con el alcohol, las drogas, la pornografía o cualquier otro vicio, todo Sméagol cree tener el control del Anillo y cree saber cuando parar. 

Sin embargo, poco a poco con el paso del tiempo, despreocupa otros aspectos de su vida por la obsesión de su vicio, de su "tesoro": "Olvidó el sabor del pan y el canto de las aves", y se convierte en Gollum, un ser miserable, esclavo de su anillo, de su "tesoro". 

Los revolucionarios

Los revolucionarios son las huestes de Lucifer, los Hijos de las Tinieblas y que responden a dos tipos:

Orcos y Goblins
Seres poco inteligentes pero muy astutos, corrompidos por el Señor Oscuro Sauron y usados como soldados y secuaces suyos.
Criaturas miserables, deformes y de apariencia bestial que odian todo lo existente, incluso a ellos mismos y a sus amos, a quienes sirven por temor.

Aunque no hacen nada bueno ni artístico, tienen una cierta tecnología, que emplean fundamentalmente para la destrucción. 

Aborrecen la luz del Sol, y no soportan estar bajo ella. Prefieren la oscuridad.

Simbolizan las innumerables legiones de ángeles corruptos que siguieron a Satanás, que corresponden a la tercera parte de todos los espíritus creados por Dios antes de formar la tierra (Apocalipsis 12, 4) y que, al deformar su voluntad, se convirtieron en demonios y espíritus inmundos que luchan contra el hombre, con el único fin de aniquilarlo.

Huruk-hai
Especie mejorada de orcos híbridos creados por Saruman, el "mago blanco" (Anticristo) resultado del cruce de orcos y elfos.
Poseedores de un carácter despiadado y cruel para la lucha que los convierte en brutales máquinas de matar, disciplinadas y obedientes, resueltos y persistentes, capaces de recorrer grandes distancias sin apenas descansos.

Simbolizan a los seguidores y defensores de la Revolución y que son el resultado de la unión apóstata de espíritus puros y espíritus malignos reclutados en el mismo corazón de la Iglesia (Isengard), que viven en cuevas subterráneas y cuyas intenciones son malignas. 

Al haber formado parte de la Iglesia, sus conocimientos les ayudan a luchar contra los Hijos de la Luz sin ningún ápice de misericordia o compasión.

La Contra-Revolución 

Ante esta acción revolucionaria y malvada es necesaria una reacción. Una re-acción que se oponga a la Revolución, que luche contra ella y que la derrote destruyendo el "Anillo", allí donde fue forjado.
La Contra-Revolución es la “re-acción” frente a la Revolución que no es, ni puede ser, un movimiento "teórico", ni una actitud "estática" que combata fantasmas. 

Más bien, es una lucha contra las pasiones revolucionarias que hoy se desbordan, contra las ideas revolucionarias que continuamente se formulan, contra los ambientes revolucionarios que nos rodean.

La Contra-Revolución no consiste en cerrar los ojos ante esta situación, ni en pactar con los revolucionarios y mucho menos, convivir con sus postulados. Al contrario, consiste en conocer su esencia, sus metamorfosis y sus agentes para combatirla de forma inteligente, sagaz y astuta con todos los medios lícitos, y con el concurso de todos los hijos de la luz.

Si la Revolución es el desorden, la Contra-Revolución es la restauración del Orden. Es decir, la paz de Cristo en el Reino de Cristo. O sea, la civilización cristiana, jerárquica, sacra, anti-igualitaria y anti-liberal.

La Contra-Revolución es la defensora de las tradiciones cristianas, promotora del desarrollo de todas las potencias del alma y la búsqueda de la perfección moral, protectora de la prevalencia de los aspectos espirituales sobre los aspectos materiales y promotora del aprecio a la Belleza, la Bondad y la Verdad en lo relacionado a la verdadera Religión, a la verdadera doctrina, al verdadero arte y a la verdadera literatura, al bien del cuerpo y el a
provechamiento de la materia.

El Orden nacido de
 la Contra-Revolución debe asentarse en los tres objetivos fundamentales en que éste fue vulnerado por la Revolución:
  • Un profundo respeto a la Iglesia y el Papado y una sacralización de los valores de la vida temporal, en oposición al laicismo, al inter-confesionalismo, al ateísmo, al panteísmo y sus secuelas.
  • Un espíritu de jerarquía en todos los aspectos de la sociedad y del Estado, de la cultura y de la vida, en oposición a la concepcion igualitaria de la Revolución.
  • Una gran diligencia en detectar, combatir y reprimir el mal en todas sus manifestaciones, embrionarias o veladas, en oposición al liberalismo revolucionario.
La única manera de destruir el Anillo es llevándolo al monte del destino en Mordor y arrojarlo al fuego. 

Asimismo, la única manera de vencer la Revolución es luchar contra ella con un ejército de contra-revolucionarios que imite y siga a Cristo, a la vez Rey (Aragorn) y Hombre (Frodo), hasta el Monte del Calvario.

Los contra-revolucionarios

Los contra-revolucionarios son los ejércitos de Cristo y de María, los Hijos de la Luz y continuando con el paralelismo del Señor de los Anillos, contrarrevolucionarios serían:

Elfos 
Los Elfos tienen una visión muy superior a la de los Hombres pudiendo ver en la lejanía y en la oscuridad si ésta no es absoluta. Son más hábiles que las demás razas, y más resistentes en cuerpo y mente que Hombres y Enanos. 
   
Se recuperan más rápido de las heridas y no están sujetos a las enfermedades. Son criaturas bellas que aman la naturaleza, la vida y la música. 

Todos los elfos son prácticamente inmortales: envejecen junto con el mundo y existen mientras el mundo exista. Son inmunes a las enfermedades; sólo pueden perder la vida en batalla o fallecer de pena. 

El Señor de los Anillos relata que los Elfos y los Hombres fueron compañeros de batalla desde tiempos remotos.

Los Elfos simbolizan a las legiones de ángeles lideradas por el Arcangel San Miguel y asociadas a los espíritus de todos los hombres justos, pelean contra Lucifer y sus seguidores: 

"Entonces hubo una batalla en el cielo: Miguel y sus ángeles lucharon contra el dragón. El dragón y sus ángeles combatieron, pero no pudieron vencer, y ya no hubo lugar para ellos en el cielo. Y fue precipitado a la tierra el gran dragón, la serpiente antigua, que se llama "Diablo" y "Satanás", el seductor del mundo entero, y sus ángeles fueron precipitados con él." (Apocalipsis 12,7-9).

Istari
Los Istari de Tolkien simbolizan a los obispos y sacerdotes (pastores) que guían y dirigen a los hombres:


- "Gandalf el gris" 
símboliza a Cristo, a Pedro, a Pablo, al Vicario de Cristo, al Papa: guía de hombres, enanos y hobbits, cayó en las profundidades de Moria junto con el Balrog, y murió y resucitó aún más sabio, vestido de blanco en vez de gris. El blanco es la sabiduría: 
“Solo tú puedes decidir qué hacer con el tiempo que se te ha dado. En efecto, muchos que viven merecen la muerte. Y algunos que mueren merecerían la vida. ¿Puedes devolversela tú? No te apresures, pues, en adjudicar muerte o juicio, pues ni aún los más sabios pueden discernir esos extremos." (Gandalf a Frodo, El Retorno del Rey).

"¿Final? No, el viaje no concluye aquí. La muerte es sólo otro sendero, que recorreremos todos. El velo gris de este mundo se levanta y todo se convierte en plateado cristal. Es entonces, cuando se ve... la blanca orilla. Y mas allá, la inmensa campiña verde, tendida ante un fugaz amanecer." (Gandalf a Pippin, el Retorno del Rey).

- "Saruman, el blanco", simboliza la apostasía dentro de la Iglesia Católica: Señor de Isengard, sucumbe a las tinieblas y se une a la Orden Negra de Mordor: 
"El mundo cambia. ¿Quién tendrá ahora la fuerza de hacer frente a los ejércitos de Isengard y Mordor? ¿De rebelarse al poder de Sauron y Saruman y la unión entre las dos torres? Unidos, mi señor Sauron, seremos reyes de la Tierra Media. El viejo mundo se consumirá en los fuegos de la industria. Los bosques morirán. Un nuevo orden surgirá, seremos adalides de una máquina de guerra a espada, lanza y puño de hierro de orco. Tan sólo hay que aniquilar a aquéllos que se nos oponen."(Saruman, Las Dos Torres).

Hombres 
En la obra de Tolkien, los Hombres simbolizan el Pueblo de Dios, las "ovejas" guiadas por los "pastores" y al frente de ellos, Aragorn, el trigesimonoveno (39º) descendiente directo por línea paterna de Isildur, hombre de Númenor y jefe de los Dunedain de los montaraces del norte, y por tanto, legítimo heredero al trono.
Aragorn utiliza su legitima autoridad como Rey de los Hombres para unificar a los pueblos libres de la Tierra Media: Hombres de Rohan y Hombres de Gondor. También, desciende al mundo de los espíritus, bajo la montaña, para reclutarlos para la guerra y así salvarlos y liberarlos. 
Así, lidera a un ejército de muertos y de vivos contra las fuerzas malignas de Sauron:

"¡Seguid en posición, hacedles frente! Hijos de Gondorn, y de Rohan, mis hermanos... Veo en vuestros ojos el mismo miedo que encogería mi propio corazón. Pudiera llegar el día en el que valor de los hombres decayera, en que olvidáramos a nuestros compañeros y se rompieran los lazos de nuestra comunidad, pero hoy no es ese día! ¡En que una hora de lobos y escudos rotos rubricaran la consumación de la edad de los hombres, pero hoy no es ese día. En este día lucharemos. Por todo aquello que vuestro corazón ama, de esta buena tierra, os llamo a luchar. ¡Hombres del Oeste!"(Aragorn, El Retorno del Rey).

Aragorn simboliza a Cristo, que encabeza su Iglesia con los santos y los hombres, cuando dice: "Yo Soy el camino" (Juan 14,6).

Hobbits
La vida de la Comarca de los Hobbits es el reflejo de la vida cristiana, antaño tranquila y sin mucha aventura. Sus principales ideales son el amor por la vida sencilla y las virtudes de antaño. 
Normalmente, eluden las "grandes aventuras" e involucrarse en los temas de los Hombres, ni siquiera a querer saber lo que sucede en la Tierra Media, refugiándose en su "Comarca" (Iglesia). 

Los Hobbits simbolizan también al pueblo de Dios (posiblemente a los grandes santos), a los  cristianos pequeños, humildes y sencillos, pero  llamados a los "grandes propósitos".

Enanos
Los enanos son seres que viven ocultos bajo las montañas. Son tenaces, indomables y persistentes. son el esfuerzo y el trabajo, y, de hecho, es la raza más trabajadora de la obra de Tolkien. 

Son valientes en el combate y su voluntad y orgullo son indoblegables, por lo que rara vez son engañados y pocas veces han sido corrompidos por el mal.
Existen al menos 7 reinos enanos, entre los que destacan: Khazad-dûm o Moria es el hogar de los nobles enanos bajo las Montañas Nubladas y Erebor el Reino bajo la Montaña el hogar de Thràin bajo la Montaña Solitaria, tomada por el dragón Smaug y recuperada por Thorin "Escudo de Roble".

Los Enanos simbolizan a los hombres y mujeres de vida consagrada, a los distintos carismas y órdenes religiosas de la Iglesia Católica, que a través de su trabajo "oculto" de contemplación y oración sirven a la causa de la Contra-revolución.


La Dama Galadriel
Galadriel, traducido del sindarin como "doncella enguirnaldada de un brillante resplandor"​ es una elfa del casada con Celebor, madre de Celebrían y abuela de Arwen.
Reina de los Altos Elfos de Lothlórien, simboliza a la Virgen María por su gran belleza, nobleza y por su resistencia contra los designios del Señor Oscuro, en una lucha que recuerda la de la Santísima Virgen aplastando la cabeza de Satanás.


Galadriel les enseña a Frodo y a Sam el "santuario", el jardín que figura ser el del Edén; les invita a mirar en el Espejo de Galadriel para descubrir "el fondo de su propio corazón"; les entrega "gracias" en el frasco con la Estrella de Ëarendil, "para que acudan a ella para pedir su intercesión" en caso de necesidad:

"Y ahora al fin llega. ¡Me darás libremente el Anillo! En el sitio del Señor Oscuro instalarás una Reina. ¡Y yo no seré oscura sino hermosa y terrible como la Mañana y la Noche! ¡Hermosa como el Mar y el Sol y la Nieve en la Montaña! ¡Terrible como la Tempestad y el Relámpago! Más fuerte que los cimientos de la tierra. ¡Todos me amarán y desesperarán!"
(Galadriel a Frodo, en la Comunidad del Anillo).

En esta lucha entre Revolución y Contra-Revolución no hay posibilidad de ser neutrales, ni se puede servir a ambos bandos (Mateo 6,24). Por ello, el contra-revolucionario debe tener:
  • una clara visión de la Revolución y la Contra-Revolución
  • un amor fundamental a Dios
  • un ánimo fuerte para luchar
  • Una coherencia para actuar
  • una noción lúcida de los desórdenes del mundo y lo que suponen
  • una sana indignación ante cualquier aspecto revolucionario 
La estrategia del contra-revolucionario consiste en mostrar la Revolución por enterosu espíritu, sus líneas de acción, cada una de sus manifestaciones o maniobras aparentemente inocentes e insignificantes.

Debe procurar, en lo posible, conquistar a las multitudes. Sin embargo, no debe hacer de eso su objetivo principal ni desanimarse ante las dificultades sino utilizar todos los medios a su alcance y vencer el espíritu derrotista de algunos que sólo ven el poder malvado de los hijos de las tinieblas. 

Debe enseñar el amor a la desigualdad en el plano metafísicoal principio de autoridad, y también a la Ley Moral y a la pureza.

"Por todo aquello que vuestro corazón ama, de esta buena tierra, os llamo a luchar. ¡Hombres del Oeste!"

domingo, 11 de diciembre de 2016

EL SEÑOR DE LOS ANILLOS: LA FE CONTADA POR TOLKIEN

"Venimos de Dios e inevitablemente los mitos que entretejamos,
aunque contengan error, también reflejarán 
un fragmento desprendido de la auténtica luz, 
la verdad eterna que está con Dios. 

Nuestros mitos pueden estar errados, 
pero se encaminan, aunque temblorosamente, 
hacia el verdadero puerto, 
mientras que el progreso materialista 
sólo conduce a un abismo abierto 
y a la Corona de Hierro del poder del Mal"
(J.R.R. Tolkien)

Hoy hablaremos de El Señor de los Anillos, El Hobbit y El Silmarillion, libros escritos por J.R.R.Tolkien, católico inglés, y de los numerosos simbolismos religiosos, bíblicos y teológicos que impregnan su obra.
Para entender mejor el trabajo de este profesor de Oxford, hemos de tener muy en cuenta algunos aspectos que compartía con escritores de su misma generación, como R. H. Benson, G. K. Chesterton, Graham Greene (con sus dudas), Evelyn Waugh, T. S. Eliot y C. S. Lewis (éstos dos últimos, cristianos anglicanos):
  • su fe católica y su pasión patriótica por la Inglaterra medieval, simbolizadas por el Fangorn de los Ents.
  • su Inglaterra católica y tradicional, anterior a la Reforma protestante, contraria tanto a la Revolución Industrial como a la Francesa, simbolizadas por el Isengard de Saruman.
  • su amor por lo pequeño, por lo rural, por lo rústico simbolizado por la Comarca de los Hobbits.
  • su horror ante el siglo XX, simbolizados tanto por Isengard de Saruman como por el Mordor de Sauron.
  • su irónico desprecio por las demagogias de la Modernidad relativista, simbolizado por el Rohan de Theoden.
  • su lejana referencia a las culturas orientales, (budismo, islam, etc.) simbolizadas por el Harad de los Mumakils.
El propio Tolkien aseguró, en una una carta a su amigo el sacerdote Robert Murray, que El Señor de los Anillos era “una novela inconscientemente católica en su elaboración y conscientemente católica en su revisión final”. 

Además, utilizó también como fuente de inspiración para su mundo imaginario, la mitología pagana germánica y céltica de la Alta Edad Media y la Antigüedad Tardía, y así explicar ciertas verdades trascendentales, casi inexplicables en el ámbito de la novela realista.
Tolkien desarrolla temas religiosos por la influencia de su fe católica, como la lucha del bien y el mal, el triunfo de la humildad sobre el orgullo, la gracia divina, la muerte y resurrección, la misericordia y la piedad, el arrepentimiento y la salvación, el sacrificio y la voluntad, la justicia, la fraternidad, etc... 

También temas bélicos, por la influencia de su implicación en las dos guerras mundiales, como el Anillo Único simbolizando la bomba atómica, o los Mumakills simbolizando los tanques, o las maquinas de asedio, los carros blindados, o los Nazgul, los aviones de combate.
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El día en que Frodo destruye el Anillo es el 25 de Marzo (según leemos en los Apéndices de la obra), alegoría del 25 de Marzo, día en que se conmemoraba en la Edad Media la crucifixión de Cristo, y que, actualmente se festeja la Anunciación a la Virgen, los dos días clave en la Redención del Pecado Original, esto es, la destrucción del Anillo. 

También, podemos apreciar la lucha del humilde hobbit Frodo (humanidad y mansedumbre de Cristo) contra el presuntamente invencible Anillo Único (Pecado Original), o el del poder de la gracia de los Valar/Eldar (Gracia del Espíritu Santo) por encima del de la voluntad de poder de los Nazgul (Soberbia del hombre).

 Conversión/Misión

"El Hobbit", libro que precede a su gran obra El Señor de los Anillos, nos enmarca la Misión de Cristo de restablecer su reinado (el tesoro bajo la Montaña Solitaria) y que tenemos encomendada cada uno de nosotros como protagonistas en la gran historia de salvación del mundo. 
             

Pero primero, es necesaria la conversión del corazón.  Sin duda, Tolkien nos relata en este libro la experiencia de conversión al catolicismo de su madre cuando él tenía muy corta edad.

La novela cuenta el viaje de Bilbo Bolsón que, con reticencia, abandona su vida doméstica cómoda y junto a una comunidad de fe (que simboliza a la Iglesia en la "La Comunidad del Anillo") se embarca en un "Viaje Inesperado" en el que va creciendo y madurando espiritualmente. 

Al volver a su casa de Hobbiton en la Comarca, Bilbo ya no es la misma persona. Es un héroe con un fuerte propósito moral, con un historial de logros virtuosos, un tesoro y el agradecimiento de las gentes que él ayuda a salvar.

Dios/Creación/Espíritu Santo

El "Silmarillion", la obra en la que se condensa todo el “background” mitológico de la Tierra Media,  se divide en cinco partes:

-"Ainulindalë" ("La música de los ainur" en quenya), que trata sobre la creación de y, dentro de ella, la creación de Arda. Simboliza la Creación del mundo por Eru Ilúvatar, que simboliza a Dios, inspirada en el Génesis.
-"Valaquenta" ("La historia de los valaren quenya), una breve relación de los Valar y los Maiar, las fuerzas sobrenaturales de Eä, llamados los Poderes de la Tierra. También hace referencia a Melkor y Sauron, un dios oscuro y su más leal sirviente.
-"Quenta Silmarillion" ("La historia de los Silmarilli" en quenya), simbolizan los eventos de la historia que ocurren desde el inicio de los tiempos hasta el final de la Primera Edad del Sol.

-"Akallabêth" ("La sepultada" en adûnaico), simbolizan la caída del hombre en el pecado, es la historia de la caída de Númenor, que tiene lugar en la Segunda Edad del Sol.

-"De los Anillos de Poder y la Tercera Edad", simboliza los reinos o gobiernos de la historia, es un resumen que narra cómo es la Tierra Media y de los acontecimientos que llevan a la historia de El Señor de los Anillos.
El Ainulindalë  nos muestra cuando Eru Ilúvatar (Dios) enseña a los Ainur (Ángeles) la visión generada a partir de su música y que el centro de Eä (Universo) es la Llama Imperecedera, alegoría del Espíritu Santo, como el poder creador de Dios: "¿Eä! ¿Que sean estas cosas! Y enviaré al vacío la Llama Imperecedera, y se convertirá en el corazón del Mundo, y el Mundo será".

Ada (la Tierra) se encuentra dentro de Eä (el Universo) y es el mundo habitado por los hijos de Ilúvatar:

-Los Primogénitos o Primeros Nacidos, son los elfos. Seres parecidos a los ainur (Ángeles) que simbolizan a los santos
Despertaron con la luz de las estrellas antes que cualquiera de los demás hijos. Envejecen muy lentamente, al mismo ritmo que el mundo, por lo que vivirán por siempre hasta que el mundo termine, al final del tiempo. 

Son las criaturas más sabias y bellas, las más poderosas y valientes, y más altas y resistentes de cuerpo y mente de la Tierra Media. 

-Los Segundos Hijos o Segundos Venidos, son los hombres. Simbolizan a los cristianos, a los movimientos y espiritualidades de la Iglesia. 
Despertaron con la primera salida de Anar, el Sol, por el Occidente. No están atados al mundo como los elfos, por lo que cuentan con el "don de la muerte", que les permite salir de los círculos del mundo al terminar su vida, para ir a un lugar al que ni los mismos valar saben y con el "don de la libertad de elegir su propio destino", don que hasta los mismos Poderes envidiarán al final. 

Los 
hobbits o medianos son una rama de los hombres pero de menor estatura: una especie de raza pigmea de un metro de altura. De naturaleza amigable y pacífica, humilde y servicial, pertenecen al ámbito rural y viven la campiña en paz y tranquilidad, protegidos por los Dúnedain del Norte.
-Los Terceros Hijos o Hijos Adoptivos, son los enanos o Khazâd. Simbolizan a los monjes y monjas de vida consagrada.Fueron creados en materia por el vala Aulë o Mahal, el Hacedor (una clase de ainur o ser espiritual de gran poder, que entró en Eä para preparar y luego proteger Arda) pero Eru mismo los adoptó como sus propios hijos. Demuestran su devoción a su "hacedor" con sus obras.
Viven recluidos en el interior de las montañas (monasterios). Son seres muy resistentes y de vida larga. Se dice que, cuando el mundo llegue a su fin, ellos serán los encargados de ayudar a Aulë a reconstruirlo.
Ángeles/Sacerdotes

Tolkien distingue dos clases:

-Ainur o "Sagrados" en lengua quenya, son seres espirituales (incorpóreos) de gran poder, los ángeles de Eru Ilúvatar que, con sus canciones, ayudaron a crear el mundo. 

Simbolizan a los arcángeles y a los coros celestiales de Dios y se dividen en dos grandes categorías: los Valar (Guardianes del Universo) y sus sirvientes, los MaiarMakwe creó a las grandes Águilas, Aule creó a los enanos y la esposa de Aule, Yavanna creó todas las plantas y animales, y con eso a los Ents.
      
    -Istari. Seres con poderes sobrenaturales enviados por los Valar en la Tercera Edad del Sol para ayudar a las razas libres en su lucha contra Sauron. Simbolizan a los apóstoles de Cristo, y por sucesión a los sacerdotes, obispos y pastores de la Iglesia. 

    Se dividen en cinco: Saruman el blanco, que se corrompe y simboliza a Lutero (Protestantismo)Radagast el pardo que se distrae con la hermosa naturaleza y simboliza a los misioneros, los dos magos azules Alatar y Pallando que se desvanecen hacia el Este, posiblemente empezando cultos de magia y que podrían simbolizar a Mahoma (Islam) y a Buda (Budismo), y Gandalf el gris, el único que permanece firme a su tarea y simboliza a Pablo (Catolicismo)

    Satanás/Diablo/Infierno

    Eru Ilúvatar (Dios) y sus ángeles cantaron en armonía para crear el mundo pero un Valar llamado Melkor no quiso ser parte del coro.

    Melkor/Morgoth, el arcángel (Ainur) caído, y su discípulo Sauron son claramente equivalentes a las de Lucifer/Satanás simbolizan el Mal
                  
    Este Valar creó su propia canción, atrayendo algunos Maiar como los Balrogs que simbolizan a las tinieblas, la oscuridad y las tentaciones de los sacerdotes, y creando algunas malvadas criaturas como los Dragones, los Trolls y los Nazgül que simbolizan el fascismo, el nazismo y el comunismo.

     

    Los Orcos, elfos corrompidos, legiones de ángeles fieles a Sauron, son mucho más numerosos que las fuerzas del bien. 

    Son sucios, horribles y están deformados por el pecado y por la oscuridad del pecado. Simbolizan a los espíritus inmundosa los demonios, con los cuales el hombre debe batallar. y que habitan en Mordor, que representa el Infierno.
                    
    Pecado Original

    El Anillo Único forjado por Sauron (siervo de Morgoth-Satán) para “atraerlos a todos y atarlos en las tinieblas” es una alegoría del Pecado Original: son las esclavitudes y placeres del mundo, el hedonismo y el egoísmo, el ansia de poder y la adicción al pecado.
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    "Un Anillo para gobernarlos a todos. 
    Un Anillo para encontrarlos,
    un Anillo para atraerlos a todos 
    y atarlos en las tinieblas"

    El Anillo es símbolo de orgullo y poder. Representa todo lo que nos arrastra al reino de tinieblas del Señor Oscuro (el Diablo), tentándonos a ser como él en su rechazo a los planes de Dios sobre nuestra vida. 

    La forma circular del anillo es la voluntad egoísta cerrada sobre sí misma. Su centro vacío, por donde metemos el dedo, sugiere el vacío interior al que nos disponemos cuando nos sometemos a su esclavitud.

    La invisibilidad que envuelve al portador, corta con las relaciones normales, con quienes nos rodean, nos aísla de los demás, creando una imagen falsa del propio "Yo", despreciando cualquier otro "Tú". 

    Gollum es la representación de los efectos del pecado: la deformación de la voluntad y el vacío del alma.

    Renunciar a la seducción de anillo es imposible para nosotros, por nuestras solas fuerzas, nosotros no podemos; necesitamos la ayuda de la gracia de Dios, porque para Él, nada hay imposible. El "yo" no puede despegarse de su "yo".

    Tolkien se inspira en las palabras del apóstol Pablo en su carta a los Romanos 7, 18-19: "Porque el querer hacer el bien está en mí, pero el hacerlo no", y en la visión de la gracia de San Agustín.

    Nuestra Búsqueda, o Misión, en clave cristiana, consiste en resistir las tentaciones del Anillo del Señor Oscuro, librarnos de nuestro egoísmo, de nuestra soberbia y rebeldía, y con humildad, dar la vida por los que amamos (que han de ser todos), y santificarnos, aceptando la cruz del sacrificio que supone amar de verdad.

    Jesucristo

    El personaje principal, Frodo, es en cierto sentido, una alegoría de Cristo verdadero hombre, que se sacrifica por toda la Tierra Media y destruye el Anillo (Pecado Original).

    Frodo al igual que Jesucristo debe llevar una carga , la maldad de la cual él no es culpable, pero al igual que Jesús es el único que puede portar esa responsabilidad porque es el inocente, a causa de eso Frodo sufre es herido y perseguido, tal como lo fue Cristo.
    La única manera de destruir el anillo (el pecado) es llevándolo al monte del destino en Mordor, en el relato bíblico la única manera de vencer el pecado fue a través de un sacrificio infinito y eterno en el monte del calvario.

    Frodo en la última etapa de su prueba tuvo que seguir a solas por un tortuoso camino, Cristo en sus horas finales perdió todo apoyo, sus apóstoles se durmieron cuando le pidió que velaran con él, le traicionaron y negaron, finalmente en su agonía clama "Padre ¿Porqué me has abandonado?" convirtiéndose la expiación en la misión más solitaria y difícil de la historia. Frodo sufre por una carga ajena pero está dispuesto a realizar ese sacrificio por el bien de todos. En la hora crucial el mal pone en el corazón de Frodo desistir de su acto heróico, al igual que Cristo en Getsemaní cuando dijo "Padre, si quieres pasa de mi esta copa"...sin embargo bebió y acabó sus preparativos para con los hijos de los hombres.

    Gandalf, símbolo de Cristo víctima propiciatoria, que muere por sus amigos en Moria y resucita en un cuerpo de gloria: "No hay amor más grande que el que entrega la vida por sus amigos".
    Aragorn, símbolo de Cristo Rey. En "El Retorno del Rey", al final de la Gran Guerra entre el bien y el mal, es coronado Rey (imagen de Cristo Rey). A pesar de ser el Heredero al trono vive oculto, de incógnito, de la misma manera Jesús heredero legítimo al trono de Israel, descendiente directo de David vive en el anonimato por muchos años. Después lidera a los hombres contra las fuerzas de Sauron y como Cristo, cumple su rol de líder y pide que le sigan, el dice "Yo Soy el camino"
    Tomando posesión de su legítima autoridad como heredero al trono desciende a conversar con los espíritus que estaban encarcelados, de la misma manera el espíritu Cristo después de su muerte en la cruz, fue a las cárceles espirituales y predicó el evangelio, abriendo la cárcel para aquellos que en otro tiempo fueron desobedientes. 

    Aragón asume todo el crédito y autoridad que merece, de igual manera llegará el momento en que toda lengua confesará que Jesús es el Cristo.

    La Virgen María

    En una carta de 1971, Tolkien afirma que la imagen de Galadriel, la Reina de los Altos Elfos de Lothlórien, guarda una semejanza con la Virgen María: "Creo que es verdad que este personaje debe mucho a la enseñanza cristiana y católica acerca de María y de la presentación de su imagen, pero en realidad Galadriel era una penitente".
    La Dama de Lothlórien resulta un personaje de gran belleza y nobleza por su resistencia contra los ataques diabólicos del Señor Oscuro, en una lucha que recuerda la de la Santísima Virgen aplastando la cabeza de Satanás.

    Es el refugio al que acuden los Elfos en todas sus necesidades, la mediadora de todas las gracias como es la Virgen. 


    Galadriel le enseña a Frodo el "santuario", el jardín que figura ser el del Edén, antes del pecado original (del que se vio libre María); y es ella quien les invita, a él y a Sam, a mirar en el Espejo de Galadriel para descubrir "el fondo de su propio corazón"; y es ella quien les entrega el frasco con la Estrella de Ëarendil, como "para que seamos muy propensos a acudir a la Virgen María para pedir su intercesión".

    Oraciones

    Los cantos élficos rememoran los Salmos y en muchos de ellos descubrimos himnos marianos: el “Elbereth Gilthoniel” es un “Ave María” en lengua quenya y el “Namarië” que canta Galadriel es un “Salve Regina”
    El Padrenuestro está presente de forma continua en toda la novela: "No nos dejes caer en la tentación (Frodo y el anillo) y libramos del Mal "(Sauron).

    Vida Eterna/Alma/Redención
    El relato corto de Tolkien, Athrabeth ("Conversación") posiblemente es el relato de Tolkien que más refleja sus profundas convicciones católicas, pues en él se reflejan los conceptos de Finrod y Andreth sobre el pecado original o el hecho de que Eru Ilúvatar (Dios) les creó originalmente como seres en armonía perfecta y no destinados a morir, pero seducidos por Melkor/Morgoth (el Maligno, Satanás), fueron privados de ese destino original. 
    Reflejan también la falta de esperanza de la raza humana en lo que les espera tras la muerte y su sufrimiento por la corta vida que se les ha asignado. La visión de Finrod, rey elfo refiriéndose a los conceptos de vida eterna y cuerpo glorioso, es elocuente.

    También queda claro el concepto de alma (fëa en el relato) como eterna, y que mora sólo por un tiempo en el cuerpo físico (hröa, "la casa del espíritu" en el relato), y es precisamente esta aparente contradicción en la doble naturaleza humana (alma inmortal y cuerpo mortal) la que motiva los amargos reclamos y cuestionamientos de Andreth a lo largo del debate con Finrod, respecto a la muerte, a su amor por el hermano de Finrod, Aegnor, etc.

    A lo largo de la conversación, llegan a conceptos como el papel que a los Hombres les tocará en la futura redención de la Creación, la Promesa de una nueva Arda (Tierra) libre de mal (analogía  
    de unos Cielos nuevos y una nueva Tierra), hasta llegar a tocar el tema de la futura Encarnación de Dios en el mundo como único remedio para el mal que Morgoth ha causado (lo que Andreth denomina la Vieja Esperanza, donde ya en el Génesis, tras el Pecado original, se les prometió a los primeros padres una futura Redención): 

    "Si Eru (Dios) no desea abandonar su obra a Melkor (el diablo), Eru debe venir a vencerle. Si Eru deseara hacer esto, no dudo que encontraría un modo, aunque no puedo predecirlo. Pues, así me parece a mí, incluso si Él en sí mismo hubiera de entrar en el mundo, Él debería también permanecer como es, el Autor en el exterior.Y sin embargo, Andreth, para hablar con humildad, no puedo concebir de qué otro modo podría alcanzarse la cura".

    Finrod la insta a considerar la Esperanza (Estel en élfico) como algo no basado en la experiencia, sino como un acto de pura confianza, es decir, el don de la Fe.

    Iglesia/Vaticano

    La Biblia comienza con un jardín en el que se encuentra el árbol de la vida, y concluye con ese mismo árbol en la ciudad santa de la Nueva Jerusalén, la ciudad celestial. El emblema del estandarte de Gondor es, significativamente, un árbol rodeado de siete estrellas: figura de las siete estrellas que son los siete ángeles de las siete iglesias del libro del Apocalipsis.
    La ciudad de Minas Tirith simboliza el Vaticano (Senescales de Cristo) y la Iglesia militante que lucha en este mundo, y que presagia la hermosura de la Nueva Jerusalén celeste, como leemos en el Apocalipsis (22, 12-14): "Estoy a punto de llegar con mi recompensa y voy a dar a cada uno según sus obras. Yo soy el Alfa y la Omega, el primero y el último, el principio y el fin. ¡Dichosos los que lavan sus vestidos para tener derecho al árbol de la vida y poder entrar en la ciudad por sus puertas!"
    Resultado de imagen de senescal gondor 
    Denethor II, Senescal de Gondor "esgrime el bastón de mando y gobierno (sin cetro) en nombre del Rey, hasta que él vuelva". Simboliza también al Papa, incluso en su debilidad, desesperanza y en su soledad.