- seguir a Cristo, amarlo y caminar confiados a su voluntad, dejando nuestras vidas en sus manos, no sólo cuando coincide con nuestros deseos, necesidades o intereses
- vivir una vida auténtica y coherente en todo momento, no sólo cuando nos encontramos en cómodos entornos cristianos o en intensas experiencias espirituales
- buscar y experimentar a Dios en cada ocasión, ya sean momentos de consolación o de desolación, no en experiencias de "subidón espiritual"
- tener una experiencia espiritual comunitaria, compartir nuestra fe y testimonio con todos los miembros de nuestra parroquia, no sólo con los de nuestro grupo
- mantener un equilibrio entre doctrina y vivencia, entre teoría y práctica, entre piedad y apostolado, entre oración y acción
Cristianos Digitales
Blog de fe cristiana
¿QUIÉN ES JESÚS?
sábado, 4 de octubre de 2025
LA HIPERESPIRITUALIDAD NARCISISTA
domingo, 28 de septiembre de 2025
JOB: EL DRAMA DEL JUSTO
- c. 1-2: Prólogo con dos escenas, la primera en la tierra, la segunda en el cielo. Job es un hombre justo, honrado, temeroso de Dios y apartado del mal, con una vida acomodada, posesiones y una gran familia. Satanás discute la fe de Job con Dios, afirmando que se alejaría de Dios si perdiera todo lo que posee. Dios permite que el "Acusador" ponga a prueba a Job, infringiéndole dolor y sufrimiento. Su mujer insta a maldecir a Dios pero Job no lo hace.
- c. 3-31: Monólogo inicial de Job y tres ciclos de diálogos entre Job y sus tres amigos, Elifaz, Bildad y Zofar (que evocan las tres tentaciones de Jesús en el desierto), quienes defienden la justicia de la retribución, por la que Dios, juez imparcial, premia a los buenos y castiga a los malos. En base a esta "sabiduría tradicional" de Israel, lo acusan de haber pecado y por ello, merecedor de su sufrimiento. El diálogo con Zofar ha sido sustituido por el poema de sabiduría (c. 28) acerca de la incapacidad humana de acceder a la sabiduría. Job protesta por su inocencia, muestra su desacuerdo con esta doctrina, desmentida por su experiencia, y apela un pleito con Dios.
- c. 32-37: Diálogo entre Job y un cuarto amigo enigmático llamado Elihú a quien podríamos identificar con el Espíritu Santo, y que anticipa y prepara la intervención redentora de Cristo. Afirma que el sufrimiento de Job no es necesariamente una consecuencia directa de un pecado cometido sino una prueba para su purificación. La justicia y la misericordia de Dios no se reducen a un simple sistema de recompensa/castigo, sino que abarcan una sabiduría y un propósito que escapan a la comprensión humana.
- c. 38-41: Tres monólogos de Dios "desde el seno de la tempestad" que no explican el sufrimiento de Job, ni entran en confrontación con él ni defienden la justicia divina. Tampoco responden a su declaración de inocencia. Dios se centra en la fragilidad humana, contrastándola con inaccesibilidad a la sabiduría, el orden y la omnipotencia divinas. En el 2º monólogo, a pesar de que Dios permite la acción del mal, de "Behemoth" y "Leviatán", la limita y la pone coto. Job responde brevemente, pero el monólogo de Dios continúa, sin dirigirse nunca directamente a Job.
- c.42: Epílogo en el que Job confiesa el poder de Dios y su propia falta de conocimiento porque antes solo había oído a Dios, pero ahora sus ojos han visto a Dios. Dios reprueba a los tres amigos y aprueba a Job. Les ordena hacer una ofrenda con Job como intercesor, a quien le muestra su favor y le restaura la salud, la prosperidad y la familia.
Job representa a los justos que asumen los sufrimientos en su propia carne y los ofrecen para que otros comprendamos. Es el "grito del justo que brota desde lo hondo" (Sal 129,1). Es la fragilidad humana que suplica y busca denodadamente a Dios, mostrando que la debilidad es la fuerza del justo (2 Cor 12,9).
El justo (representado por Job) no sabe por qué ni para qué sufre; todo el mal que experimenta es un sinsentido... y todo eso es parte de la prueba. Dios parece ausente, lejano y misterioso ante el sufrimiento, y el hombre, como Jacob en su visión nocturna (Gn 32), lucha contra Dios y va a ser gloriosamente vencido por una sabiduría divina que supera todo saber humano.
De ambos podemos decir que "de sus cicatrices hemos aprendido". Job, como Cristo, "tenía que padecer y así entrar en la gloria" (cf. Lc 24,26) representando a la humanidad sufriente que se pregunta por el sentido de su existencia.
El libro de Job nos enseña que la actitud ante el dolor y el sufrimiento debe ir unida al reconocimiento de la grandeza de Dios, pues la vida humana, con sus penas y alegrías, está en manos de Dios y nada escapa a su poder.
Por ello, los cristianos ofrecemos nuestros sufrimientos, nuestra debilidad y nuestra falta de conocimiento para poder reconciliarnos, primero con nuestra propia condición humana caída por el pecado, y con nuestras ideas mezquinas y planteamientos estrechos, y finalmente, con Dios, con quien podemos dialogar en medio de nuestras dudas, como lo hace un hijo con su padre, sabiendo que tiene un plan superior que no alcanzamos a comprender.
sábado, 27 de septiembre de 2025
PROVERBIOS: UNA OFERTA DE SENSATEZ Y CORDURA
- 1-9: Epígrafe: "Proverbios de Salomón, hijo de David, rey de Israel". Tema: la sabiduría
- 10,1-22,16: Epígrafe: "Proverbios de Salomón". Tema: el buen comportamiento
- 22,17-24,34: Epígrafe: "Dichos de los sabios". Tema: la templanza y la pereza
- 25-29: Epígrafe: "Otros proverbios de Salomón que copiaron los funcionarios del rey Ezequías de Judá". Tema: proverbios diversos
- 30,1-14: Epígrafe: "Otros proverbios de Salomón que copiaron los funcionarios del rey Ezequías de Judá". Tema: Sabiduría de Dios
- 30,15-33: Epígrafe: "Las palabras de Agur". Tema: proverbios numéricos
- 31,1-9: Epígrafe: "Las palabras del rey Lemuel de Massa. Tema: consejos a los reyes
- 31,10-31: Epígrafe: "La mujer sabia". Tema: alabanzas a la mujer
- Los Apóstoles y los autores neotestamentarios identificaron esta Sabiduría con Jesucristo, el Verbo de Dios hecho carne. Cristo aparece como la Sabiduría eterna del Padre (Jn 1,9; 1 Cor 1,24.30; 2,6; Col 2,3; Stg 3,17; cf. Ef 1,17; Ap 5,12), sabiduría trascendente (personificada) y a la vez humana (encarnada), que habla con profecías y con parábolas.
- El propio Jesús se confirma como una "Sabiduría más alta que Salomón" (Mt 12,42) y utiliza fórmulas breves y concisas, comparaciones y parábolas, es decir, "proverbios" que corrigen la denominada "teología deuteronomista" o "sabiduría retribucionista" de Israel (véase Jn 1,46; 3,8; 7,24; 8,32; 15,13; 20,29), provocando la reflexión antes de mostrar una verdad nueva y superior (Mt 13,12; 16,25; 19,6; Mc 2,27; Lc 4,23;14,27; 16,10).
- Los Padres de la Iglesia entendieron el libro de los Proverbios como una etapa previa de la Revelación, es decir, a la manifestación del misterio de la Trinidad.
miércoles, 24 de septiembre de 2025
QUÉ HACER, QUÉ SER Y PARA QUÉ EVANGELIZAR
- Tomando la iniciativa: ser trata de "salir de nuestra zona de confort y liderar", aún estando "mal equipados", o sin tener experiencia, o incluso siendo "nuevos o inexpertos". No podemos esperar a que otros actúen por nosotros. Es necesario que alguien comience a formarse y a formar discípulos misioneros que edifiquen verdaderas comunidades cristianas.
- Rezando juntos: se trata de abrirnos "al poder de Dios" y lograr un impacto espiritual en la vida de los demás, de comprometernos a rezar con y por aquellos que deseamos tener en la comunidad, incluso por quienes aún no conocemos.
- Invitando con sentido: se trata no sólo de invitar a alguien a un grupo, a un retiro o a una parroquia, sino de demostrar que esa persona nos importa y que queremos que forme parte de nuestra vida, de nuestras amistades cristianas, de nuestra comunidad. No es algo que haya que pensar mucho, tan solo hay que hacerlo.
- Invirtiendo en otros: El "verdadero objetivo" está "en la inversión" de tiempo y de compromiso con otros y, por tanto, con la comunidad parroquial. Se trata de tener visión a largo plazo y una firme voluntad de servir en y a la comunidad.
- Mirando a Jesús y haciendo lo que Él hizo: Él tomó la iniciativa por los suyos, rezó por ellos, les invitó e invirtió en ellos. Pasó tiempo con la gente, hizo crecer las relaciones, desafió a otros, les dio responsabilidades, los dejó fracasar y los perdonó. Se trata de relacionarse con la comunidad y de no quedarse "en la superficie", de conocerse y generar confianza, de compartir experiencias, de apoyarnos en los problemas y alegrarnos en los éxitos.
martes, 23 de septiembre de 2025
LA FE: DON GRATUITO Y RESPUESTA LIBRE
lunes, 1 de septiembre de 2025
¿PIEDRAS EN ASCUAS O LADRILLOS COCIDOS?
- Falta de discipulado. Si las parroquias sólo reciben y acogen a las personas que llegan, pero no ofrecen un itinerario catequético y sacramental para convertirse en discípulos maduros, se acabarán "desinflando" y, entonces se produce el estancamiento espiritual.
- Falta de comunidades misioneras. Si las parroquias se estancan porque se confunde camino con meta y no se construyen auténticas comunidades misioneras, todo tiende a volver a donde estaba, y entonces vuelven a ser una Iglesia de mantenimiento.
- Falta de visión. Si la parroquia pierde su pasión y su visión misioneras, y vuelve "a lo de siempre", a la "casilla de salida", las personas terminan regresando a sus "cosas" o marchándose a otros lugares, y entonces dejan de suscitar vocaciones y santos.

domingo, 31 de agosto de 2025
¿HA PERDIDO EMAÚS SU ESENCIA?
- hemos caído en una cierta "rutina evangelizadora", hemos abandonado sus sólidos cimientos originales y los hemos sustituido por nuestros "cimientos de arena"
- hemos ido añadiendo nuestros propios criterios, opiniones y ocurrencias, convirtiéndolo en un método sincretista, entre lo profano y lo espiritual
- hemos caído en el "efecto gravitatorio", en una especie de "rueda de hámster" sobre la que caminamos pero no avanzamos ni llegamos a ninguna parte...volvemos siempre al mismo sitio
- hemos convertido el retiro en un "subidón espiritual", donde nos ponemos el "polo de cristianos" y "servimos", pero una vez fuera, nos desinflamos y nos olvidamos de Dios
- hemos pasado a ser "católicos ocasionales" (un día a la semana, dos fines de semana al año), pero con escasa asistencia a los sacramentos (también, un día a la semana - eucaristía -, y algunos meses al año - confesión -)
- nos reunimos semanalmente en nuestro club social, pero no adquirimos ningún compromiso con la parroquia ni con sus miembros, hasta el punto de que somos absolutos desconocidos para ellos
- vivimos nuestra fe sólo en "Emaús", pero no buscamos el crecimiento espiritual, la constancia en la oración, la lectura de la Sagrada Escritura o la participación en las pastorales parroquiales
- nos hemos transformado en "Judas" que caminamos junto al Señor pero no le amamos de corazón y, a la menor oportunidad (tras el retiro), le traicionamos
- nos hemos apropiado del mérito, del protagonismo y de la gloria evangelizadora, buscando "deslumbrar" en lugar de "alumbrar", ansiando reconocimiento y admiración
- invitamos a caminar a todo tipo de personas, buscando más lo cuantitativo que lo cualitativo: el objetivo es llenar el retiro
- nos hemos dedicado a "opinar", a "cumplir" y a "adquirir veteranía", olvidando rezar, obedecer y ser humildes
- nos hemos convertido en "activistas espirituales descabezados" que hacemos cosas sin sentido, decimos "tópicos" sin propósito y no avanzamos en nuestra relación con Dios
- hemos inventado un hipermercado de experiencias espirituales, "variantes de retiros especializados" según la vocación, la edad o el estado (de sacerdotes, de matrimonios, de niños, de discapacitados...) pero hemos olvidado construir comunidad
- hemos adquirido una actitud de superioridad farisea sobre el resto de los métodos evangelizadores o sobre otros carismas, creyendo que Emaús es "lo más cristiano"
- hemos obviado qué hacer con todas las personas tras el retiro, sobre todo, en cuestión de formación catequética, itinerarios de discipulado, compromiso eclesial y sacramentalidad
"Vigilaré mi proceder, para no pecar con mi lengua; pondré una mordaza a mi boca. Señor, dame a conocer mi fin y cuál es la medida, para que comprenda.
Y ahora, Señor, ¿qué esperanza me queda? Tú eres mi confianza. Líbrame de mis inquietudes, no me hagas la burla de los necios. Enmudezco, no abro la boca, porque eres tú quien lo ha hecho.
Escucha, Señor, mi oración, haz caso de mis gritos, no seas sordo a mi llanto; porque yo soy huésped tuyo, forastero como todos mis padres"
(Sal 39,2-14)
"Yo esperaba con ansia al Señor; él se inclinó y escuchó mi grito: me levantó de la fosa fatal, de la charca fangosa; afianzó mis pies sobre roca, y aseguró mis pasos; me puso en la boca un cántico nuevo, un himno a nuestro Dios.
Dichoso el hombre que ha puesto su confianza en el Señor. Cuántas maravillas has hecho, Señor, Dios mío, cuántos planes en favor nuestro; nadie se te puede comparar. Intento proclamarlas, decirlas, pero superan todo número.
Tú no quieres sacrificios ni ofrendas, y, en cambio, me abriste el oído; no pides holocaustos ni sacrificios expiatorios; entonces yo digo: 'Aquí estoy para hacer tu voluntad'.
Dios mío, lo quiero, y llevo tu ley en las entrañas. He proclamado tu justicia ante la gran asamblea; no he cerrado los labios, Señor, tú lo sabes.
No me he guardado en el pecho tu justicia, he contado tu fidelidad y tu salvación, no he negado tu misericordia y tu lealtad ante la gran asamblea.
Tú, Señor, no me cierres tus entrañas; que tu misericordia y tu lealtad me guarden siempre, porque me cercan desgracias sin cuento. Se me echan encima mis culpas, y no puedo ver; son más que los pelos de mi cabeza, y me falta el valor.
Señor, dígnate librarme; Señor, date prisa en socorrerme. Yo soy pobre y desgraciado, pero el Señor se cuida de mí; tú eres mi auxilio y mi liberación: Dios mío, no tardes"
(Sal 40, 2-18)
sábado, 30 de agosto de 2025
EL HOMBRE ALCACHOFA (IMAGO DEI)
- las primeras capas son externas y corresponden al cuerpo: las funciones corporales, es decir, las facultades y los sentidos con los que percibimos el mundo exterior (vista, oído, tacto, gusto y olfato). Son capas que están más secas, más oscuras: los sentidos y las pasiones
- las siguientes son capas intermedias y corresponden al alma: las funciones emocionales, la percepción sensible, la imaginación, la memoria. Son las capas más jugosas y más tiernas: los deseos, las emociones y los sentimientos
- la última capa es el corazón y corresponden al espíritu: las funciones cognitivas, la inteligencia y la voluntad. Son las capas más exquisitas, las más apetecibles: el razonamiento y la toma de decisiones
- las obras de la carne: fornicación, impureza, libertinaje, idolatría, hechicería, enemistades, discordia, envidia, cólera, ambiciones, divisiones, disensiones, rivalidades, borracheras, orgías y cosas por el estilo
- los frutos del Espíritu: amor, alegría, paz, paciencia, afabilidad, bondad, lealtad, modestia, dominio de sí
miércoles, 27 de agosto de 2025
SECTAS EN LA IGLESIA
- Antiguo Testamento: Dt 13,1-4; Prv 14,12; Jr 14,14-15; 23,16.21.30-32; 27,15; Ez 13,6-9; Miq 3,5-7; Zac 10,2
- Nuevo Testamento: Mt 7,15-16.22-23; 15,14; 24,4.10-13.24-25; Mc 13,21-23; Hch 20,29-30; Rm 16,17-18; 2 Cor 11,4.13-15; Gal 1,6-7; 1 Tim 4,1; 6,3-5; 2 Tim 3,5.13; 4,3-4; Jud 1,4.11; 1 Jn 2,22; 4,1-3; 2 Jn 1,9; 2 P 2,1-3; 17,19; Ap 19,19-20
La RAE define "secta" como "grupo religioso cerrado guiado por un líder que ejerce un poder carismático sobre sus adeptos y cuyos postulados se apartan de la doctrina ortodoxa".
Las sectas son grupos endogámicos y herméticos que se infiltran dentro de la Iglesia y que generan controversia, confusión y división, rasgos característicamente rebeldes y, por tanto, demoníacos:
- ideas y conceptos subjetivos, alternativos y alejados de la doctrina tradicional
- dependencia, exaltación, fidelidad y obediencia absolutas hacia el fundador carismático
- crítica y rechazo a la autoridad y jerarquía eclesiales
- abandono de la verdad doctrinal bíblico-apostólica común de la Iglesia
- supresión de la conciencia de los miembros (falsa interpretación de Rom 12,2)
- aislamiento y alejamiento familiar de sus miembros (falsa interpretación de Jn 17,16)
- excesivo dogmatismo y rigurosa moralidad (falsa interpretación de 2 P 1,5)
Sus principales "adeptos" suelen ser personas vulnerables, con carencias familiares/eclesiales/sociales o que están pasando por una crisis de fe, de esperanza, de motivación, de expectativas... que les impiden de adaptarse a la comunidad cristiana tradicional y asumir compromisos con ella.
- Atracción-Seducción: se infiltran en parroquias, en comunidades religiosas o en retiros espirituales en los que captan "seguidores" voluntarios aunque inducidos (proselitismo). Son grupos, en principio y aparentemente, atractivos y muy espirituales que enseñan solo lo positivo de su "carisma", generan emociones buenas, acogen afectivamente a las personas y las acompañan personalmente a modo de dirección espiritual.
- Captación: a través de este acompañamiento o "dirección espiritual", los miembros de la organización conocen todas las esperanzas y sueños, anhelos y deseos, situaciones y problemáticas de las personas, a quienes se invita a “decidir” formar parte del grupo, si bien su alta emotividad limita su capacidad de razonamiento o discernimiento.
- Conversión: las personas, al sentirse miembros elegidos por Dios para una tarea específica, asumen diversas responsabilidades y compromisos dentro del grupo.
- Adoctrinamiento: las personas basan y someten todos sus pensamientos y actos a lo propio del "carisma" (habitualmente, a lo que dice el fundador o líder), toman éste como propio y se vinculan exclusivamente con los miembros del grupo, distanciándose y alejándose de sus familiares y amigos.
- Control de la conducta: se suprimen conductas propias y tradicionales, instalando progresivamente, otras nuevas, hasta convertirlas en hábitos
- Control de la información: se controla la información que llega a los seguidores, tanto interna (polémicas, denuncias, delitos que ocurren dentro de la secta), como la externa (noticias, videos, libros y todo el tipo de información que llega desde fuera).
- Control de las ideas: se establece un sistema de lógica cerrada y dicotomizada en "sí y no", en "bueno y malo", en "virtud o pecado". Se niega la posibilidad del discernimiento.
- Control de las emociones: se generan emociones buenas y atractivas para atraer a los seguidores y una vez convertidos, les generan malas emociones como culpabilidad, temor, dependencia, impotencia si no se hace lo que mandan.
- líder fundador: laico o consagrado de gran carisma, de gran capacidad oratoria y persuasiva, autoritarismo y rigorismo, con un "supuesto" conocimiento religioso profundo y elegido por Dios
- grupo de colíderes: laicos o consagrados veteranos en el grupo y completamente convencidos de sus postulados, de gran fanatismo y obediencia ciega al líder (incluso dulía)
- miembros o adeptos: normalmente, jóvenes frustrados o en crisis familiar o personal, personas en busca de sentido vivencial y espiritual, altamente manipulables y voluntariamente dependientes