¿QUIÉN ES JESÚS?

La vida de Jesús siempre ha suscitado preguntas a lo largo de los últimos dos mil años.

¿Cómo pudo un carpintero que fue ejecutado por los romanos convertirse en el hombre más famoso de la historia?
¿Fue Jesús alguien verdaderamente real?
¿Cómo puede Dios ser un hombre al mismo tiempo?
¿De qué manera podría esto tener algún sentido para mi vida?

Estas son algunas preguntas, pero aquí tienes un espacio para formular las tuyas.
Mostrando entradas con la etiqueta estad preparados. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta estad preparados. Mostrar todas las entradas

sábado, 6 de agosto de 2022

MEDITANDO EN CHANCLAS (7): ESTAD PREPARADOS

"Tened ceñida vuestra cintura 
y encendidas las lámparas
(Lc 12,31)

Hoy Lucasel médico evangelista, nos invita a la vigilancia y la fidelidad a Dios. Y lo hace utilizando imágenes y enseñanzas del Sermón de la Montaña (Mt 5,1-7,29), parábolas (Mc 13,33-37;Mt 24,42-51;Lc 12,41-48), su gran conocimiento del TaNaK (Biblia hebrea), de la literatura sapiencial hebrea (Libro de la Sabiduría, Salmos) y de las cartas de Pablo. 

El Señor sigue hablándonos y preparándonos para nuestra cita con Él en la vida eterna, ofreciéndonos el "boarding passque contiene todo lo necesario para el viaje (nombre, fecha, lugar de origen y destino), así como el código de barras que se escaneará en la puerta antes de embarcar:

Vended vuestros bienes y dad limosna", me invita al seguimiento de Cristo a través del desapego hacia lo material y del servicio a los demás.

"Donde está vuestro tesoro, allí está vuestro corazón, me llama a reflexionar sobre dónde tengo puestas mis esperanzas e ilusiones, mis deseos y anhelos. 

"Tened la cintura ceñida" ("ceñid los lomos"), 
me exhorta a tener una disposición permanente a ponerme en caminoes decir, a estar preparado tanto para la venida de Cristo como para la de mi propia muerte. Evoca el uso de trajes talares en la antigüedad y que debían levantarse cuando tenían que trabajar, viajar o correr. 

"Tened la lámpara encendida"me invita a tener una preparación espiritual, es decir, a estar en presencia de Dios y en estado de gracia, cultivando una vida interior de oración y sacramentos. Evoca el éxodo del pueblo de Israel por el desierto hacia la tierra prometida: las lámparas ardían continuamente en la tienda del encuentro, el santuario donde se encontraba el arca de la alianza y las tablas de la Ley, es decir, el lugar de la presencia de Dios.

"Bienaventurados aquellos criados a quienes el señor, al llegar, los encuentre en vela; en verdad os digo que se ceñirá, los hará sentar a la mesa y, acercándose, les irá sirviendo", el mismo Jesús hecho siervo por nosotros, me llama a estar alegre y en vela para invitarme a su mesa, a las bodas del Cordero (Ap. 21). 

"Estad preparados, porque a la hora que menos penséis viene el Hijo del hombre"Me insiste en la incertidumbre de la hora y en la necesidad de estar siempre atento y preparado, que no preocupado y en permanente estado de ansiedad o de temor por la muerte o por la parusía ("No temas, pequeño rebaño, porque vuestro Padre ha tenido a bien daros el reino), sino más bien, a "tener todo en orden", a vivir en gracia de Dios, a estar desapegado de lo temporal y dispuesto a lo eterno.

Para concluir y ante la siempre impetuosa intervención de Pedro, Jesús le contesta (como a menudo, con indirectas y en este caso, a través de una parábola) y le habla de los que tienen mayor responsabilidad en su Iglesia (es decir, de él mismo y de los apóstoles, de los obispos y presbíteros, y por añadidura, de todos nosotros, los cristianos): 

"Al que mucho se le dio, mucho se le reclamará; al que mucho se le confió, más aún se le pedirá"Se refiere a la sabia justicia divina, que exige mucho a quien se le han dado talentos, gracias y dones, y que exige aún más a quien se le ha dado gran responsabilidad y autoridad. 

Para hacer el "check in", registrarme como viajero y "facturar mis maletas" con la suficiente antelación, debo contestar una serie de cuestiones:

¿Sigo a Cristo y sirvo a otros? 
¿Me preocupo más de mis necesidades materiales que de las espirituales?
¿Llevo una vida interior de gracia y oración, en presencia de Dios? 
¿Estoy preocupado por mi muerte o alegre por mi vida eterna?
¿Estoy preparado para todo? 

JHR