¿QUIÉN ES JESÚS?

La vida de Jesús siempre ha suscitado preguntas a lo largo de los últimos dos mil años.

¿Cómo pudo un carpintero que fue ejecutado por los romanos convertirse en el hombre más famoso de la historia?
¿Fue Jesús alguien verdaderamente real?
¿Cómo puede Dios ser un hombre al mismo tiempo?
¿De qué manera podría esto tener algún sentido para mi vida?

Estas son algunas preguntas, pero aquí tienes un espacio para formular las tuyas.

lunes, 11 de mayo de 2020

OIKONOMÍA: LA ECONOMÍA DE LA GRACIA

Dios, conforme a la riqueza de la gracia que,
 en su sabiduría y prudencia, 
ha derrochado sobre nosotros, 
nos ha dado a conocer el misterio de su voluntad: 
el plan que había proyectado realizar por Cristo, 
en la plenitud de los tiempos: 
recapitular en Cristo todas las cosas del cielo y de la tierra. 
(Efesios 1,10)

Decía el cardenal Newman que "la Gracia es la Gloria en el exilio, la Gloria es la Gracia en casa"

Y es que, aunque la Gracia es propia de la tierra (anterior a la muerte) y la Gloria, del cielo (posterior a la muerte), en realidad, son lo mismo: Dios donando Su vida amorosa a los hombres, aunque en distinto escenario, en distinta dimensión.

Hoy hablaremos de la Economía de la Gracia y de cómo a través de ella, el hombre alcanza a conocer a Dios, y viceversa.

La Gracia de Dios
El Catecismo de la Iglesia Católica define la Gracia como "el favor, el auxilio gratuito que Dios nos da para responder a su llamada: llegar a ser hijos de Dios, hijos adoptivos, partícipes de la naturaleza divina, de la vida eterna." (CIC 1996).

La participación en ella es sobrenatural porque sobrepasa las posibilidades de la naturaleza humana y no empírica o “experimentable”, sino que solo se recibe por la fe.

Normalmente, el Catecismo cuando habla de Gracia, se refiere a la Gracia santificante, pues se trata del don divino por el que cada hijo de Dios puede llegar a la santidad. Además, podemos añadir el término de Gracia divinizante, pues se trata del don de la vida divina en el alma del cristiano.

El Catecismo distingue entre Gracia habitual, como el don permanente de la vida divina que permite la relación con Dios y Gracia actual, como la intervención de Dios en el camino de santificación de cada cristiano (CIC 2000).

Otra distinción es entre Gracia sacramental, recibida con cada uno de los sacramentos y Gracia especial o carisma, aquella que el Espíritu Santo concede para alguna persona o situación particular o para la vivencia de un determinado tipo de vida, también llamada Gracia de estado (CIC 2003).

Teología y Oikonomía
La Teología, del griego theos/logos: Dios/estudio, que significa el estudio de Dios, se refiere al misterio inmanente y absoluto de la vida íntima y eterna del Dios-Trinidad. Hablamos del "Conocimiento de Dios".

La Oikonomíadel griego oikos/nomos: casa/ley, que significa administración doméstica, se refiere a todas las obras de Dios por las que se revela y comunica su vida. Es el plan salvífico de Dios revelado, sobre todo, en la obra redentora de Jesucristo y en la obra santificadora del Espíritu (Gálatas 4,4-6). Es lo que conocemos como "Economía de la Gracia".

La Economía de la Gracia es Dios donando las riquezas divinas en el espíritu del hombre, para hacerlo partícipe de sus planes y propósitos eternosPor ella se nos revela el Conocimiento de Dios y, a la vez, éste ilumina toda la  Economía de la Gracia. Las obras de Dios revelan quién es en sí mismo y, a la vez, el misterio de su Ser íntimo, ilumina la inteligencia de todas sus obras (CIC 236) .

De forma análoga, ocurre lo mismo entre nosotros, los seres humanos. Nos damos a conocer por nuestro obrar, y a medida que otros nos van conociendo, mejor comprenden nuestro obrar. 

La Gracia, que es Dios mismo donado, puede llegarnos bien directamente desde Él a nosotros o bien indirectamente, a través de mediadores que selecciona, dispone y utiliza al objeto de lograr nuestra salvación.

Plenitud y participación en la Gracia
God's Love Upon Us - Home | FacebookJesucristo es la plenitud de la Economía de la Gracia, quien, a través de su Encarnación, la ha derramado sobre la tierra: "Pues de su plenitud todos hemos recibido, gracia tras gracia. Porque la ley se dio por medio de Moisés, la gracia y la verdad nos han llegado por medio de Jesucristo" (Juan 1,16-17).

La Gracia de Dios se ha manifestado a través de Cristo, segunda persona de la Trinidad, para la salvación de los hombres. 

Todo el Conocimiento y la Gracia de Dios nos viene del Hijo: "Yo soy el camino y la verdad y la vida. Nadie va al Padre sino por mí. Si me conocierais a mí, conoceríais también a mi Padre. Quien me ha visto a mí ha visto al Padre" (Juan 14, 6 y 9).

La Santísima Virgen María, predestinada desde la eternidad como la excelsa Madre del divino Redentor, por decisión de la divina Providencia, colabora con Su Hijo en la administración de la Gracia en la tierra. "Alégrate, llena de gracia, el Señor está contigo" (Lucas 1,28).

Novena - NavidadAsí, la "Llena de Gracia" participa, de modo singular, desde la Anunciación y después de su Asunción a los cielos, en la obra salvífica de Su Hijo, distribuyendo gracias abundantes para el restablecimiento de la vida sobrenatural de los hombres, perdida y relatada en el libro del Génesis, e intercediendo para procurar dones para la salvación de todos sus hijos (Concilio Vaticano II, Lumen gentium, 61-63).

Es cierto que ninguna criatura puede equipararse dentro de la economía de la Gracia con el Verbo encarnado y Redentor, ni tampoco con la Bienaventurada Virgen María.

Sin embargo, en el misterio de la Iglesia, que también es llamada virgen y madre, Dios ha dispuesto, por su Providencia amorosa y bondadosa, designar a los obispos y presbíteros como administradores de sus dones y gracias entre su pueblo fiel para que los difundan sobre las criaturas según distintos talentos y carismas

San Pedro, primer papa de la Iglesia fue elegido por el mismísimo Cristo para apacentar sus ovejas, es decir, nombrado administrador y dispensador de la economía de la Gracia en favor de judíos y gentiles. Y que a su vez, él transmitió, por el poder concedido por el Maestro, cuando, dirigiéndose a la diáspora en el Ponto, Galacia, Capadocia, Asia y Bitinia, dice"Como buenos administradores de la multiforme gracia de Dios, poned al servicio de los demás el carisma que cada uno ha recibido" (1 Pedro 4, 10).

San Pabloel apóstol de mayor conocimiento en el misterio oculto de Cristo por revelación divina, fue el administrador y distribuidor de la economía de la gracia de Dios, en favor de los gentiles desde el primer siglo hasta nuestros díasEl mismo Cristo le encargó predicar su misterio y anunciar la buena noticia de Sus riquezas (Efesios 3, 2-10)

También, los santos a lo largo de la historia de la Iglesia han participado de diversas manera en la administración y suministro de la Gracia, haciéndose copartícipes de la única fuente de mediación del Redentor.

Finalmente, el pueblo de Dios, a través del “consejo de los santos” es quizás la forma más cercana y sencilla de la economía de la Gracia. Dios actúa mediante de una palabra, de una situación o de una acción especifica, en un lugar y en un momento determinados. Habla por boca de otros, poniendo las palabras adecuadas en los labios de aquel a quien ha designado para transmitir un determinado mensaje a otro.

Otros medios de Gracia
La asidua lectura de la Palabra de Dios, inspirada, viva y eficaz, ya sea en público o en privado, en misa o en grupo, es un medio por el que derrama su Gracia y una guía por la que Dios ha querido revelarse al hombre. 

Los ministros unidos en el sacerdocio a Cristo nos ofrecen a través de la administración de los Sacramentos de la Iglesia uno de los principales medios conductores de la Gracia de Dios. Cada Sacramento contiene una Gracia particular, produce un efecto espiritual distinto y particular en quien participa de él y un efecto proporcional a la intensidad de la fe de quien lo recibe. 

Leyes de la Gracia
Dios actúa siempre libremente en el uso de su libertad, sin someter en sus decisiones a nadie más que a Sí mismo. Y por amor a nosotros, los hombres, ha querido respetar nuestro libre albedrío y "someterse" a ciertas maneras de comportarse en su relación con nosotros y en su forma de darse gratuitamente a nosotros: son las “Leyes de la Gracia”:

-Dios tiene un plan para cada uno. Hay quienes apelan al destino o al azar para justificar una administración descontrolada y caprichosa de la vida humana, que finaliza con la muerte.

Sin embargo, es Dios quien gobierna cada realidad humana de manera minuciosa, detallada, precisa e individualizada (Mateo 10,30; Lucas 12,7). 

El Creador no deja nada al azar sino que construye su Designio de Amor de forma particular e individual para cada una de sus criaturas, distribuyendo dones y gracias, presentándonos situaciones y personas diversas, actuando en nuestro interior y observando nuestra reacción ante cada una de ellas. 

En función de nuestras respuestas, nos presenta nuevas e innumerables situaciones en las que sigue asistiéndonos con Su Gracia, de tal forma que el resultado de su Plan para cada uno de nosotros sea el Cielo, a no ser que se lo impidamos por el ejercicio de nuestra libre voluntad.

Dios desarrolla su Plan Perfecto para cada uno de nosotros con el único objetivo de llevarnos a su amistad íntima y eterna en el cielo, aunque respetando, ante todo, nuestra libertad. 

Además, cada Gracia que Su Providencia derrama sobre cada uno de nosotros, repercute e implica otras sobre otras personas, actuando en beneficio mutuo de todas ellas. Así nos convierte en mediadores en su deseo salvífico y santificador de todas sus criaturas.

-Dios acompaña de muchas gracias una desgracia. Muchos piensan que una desgracia padecida supone una pérdida del favor de Dios, porque nos castiga, porque se ha olvidado de nosotros, o porque nos ha abandonado, al permitir que experimentemos el mal o el sufrimiento.

Sin embargo, aunque una desgracia es una experiencia dolorosa muy intensa, que supone una fuerza de voluntad firme, que supone una prueba de fe y perseverancia, Dios, que conoce perfectamente nuestras limitaciones porque es quien nos ha creado, nos acompaña en cada desgracia con un derramamiento de Su Gracia proporcional o incluso, superior a la intensidad de la desgracia padecida. 

La cuestión es ser capaces de comprender y aprovechar esa lluvia de Gracias con cada desgracia, para acercarnos más a Dios, en la certeza de que solos, no podemos.

-Dios nos regala gracias ilimitadas. El Creador no escatima nada en la generosa administración de su Gracia y nos ofrece un crecimiento ilimitado en nuestra vida de dones y gracias. Cuanta más gracia pidamos, cuanta más gracia aceptamos, más gracia recibimos de Dios (Mateo 25,29). 

Cuanto más abramos nuestra alma, nuestra mente y nuestro corazón a la Gracia, cuanto más dejemos que el Espíritu Santo suscite Sus mociones interiores, cuanto más las aceptemos, cuanto más nos dejemos guiar en dirección al Cielo, nuevas y más abundantes gracias recibiremos para nuestro bien. 

Y lo mismo ocurre cuando se las pedimos a su Hija, Madre y Esposa, la Virgen María: nos regala más y más abundantes gracias. No hay límite en la entrega de la Gracia, porque Ella es "llena de Gracia" por decisión irrevocable de Dios.

-Dios concede su Gracia a los humildes. El apóstol Santiago lo deja muy claro: “Dios resiste a los soberbios y da su gracia a los humildes” (Santiago 4,6). 

La Gracia no puede darse al soberbio, quien cree no necesitar a Dios, quien dice sentirse libre, capaz y autónomo, quien se niega a ser dócil al amor de Dios en su interior porque levanta una barrera de rencor que impide recibirla. 

La Gracia es el favor gratuito de Dios en nuestro beneficio pero no puede fluir donde no hay amor ni humildad para reconocerse hijo amado de Dios y, por tanto, dependiente de Él. 

-Dios se auto limita en favor de nuestra libertad. Dios se limita así mismo, frena su omnipotencia en favor de nuestra libertad, para que le "permitamos" entrar en nosotros, y así, derramarse con sobreabundancia de amor en nuestra alma, y ofrecernos una comunión íntima con Él.

La Gracia es el bien más valioso para un cristiano, que actúa, cuando lo permitimos, directamente en nuestro corazón, realiza cambios radicales en nuestra vida y nos hace progresar en nuestro conocimiento de Dios. Es el vino nuevo en odres nuevos (Lucas 5,37-38). Pero Dios ni siquiera nos pide permiso para entrar. Espera afuera como un mendigo (Apocalipsis 3, 20), a que la libertad de nuestro amor verdadero le abra la puerta de nuestro corazón y cenar con nosotros.

miércoles, 6 de mayo de 2020

APOCALIPSIS 8-11: LAS SIETE TROMPETAS

"Y cuando abrió el séptimo sello 
se hizo en el cielo silencio 
como de media hora. 
Y vi a los siete ángeles 
que están de pie delante de Dios;
 y les dieron siete trompetas."
(Apocalipsis 8,1-2)

Veíamos en el artículo anterior que cuando el Cordero abre el 7º sello, se produce un silencio "como de media hora", srefiere a la mitad de un tiempo, es decir, que hay dos partes

La primera parte es un tiempo para ponderar lo que va a pasar: aparecen los septenarios de las trompetas y de las copas. Dios retrasa el tiempo para iniciar el Juicio Final para darnos la oportunidad de convertirnos y que nos salvemos el mayor número de personas. La segunda parte es la venida del nuevo mundo, tras la Ira de Dios.

El Shofar

Para entender el significado de las trompetas, tenemos que recurrir, de nuevo, al "código judío".

La trompeta o "shofar" era el instrumento ceremonial, fabricado con el cuerno de un animal puro y limpio o "kosher", de carnero, cabra o similar pero nunca de vaca, novillo o toro, y que se utilizaba en el Templo de Jerusalén y en las sinagogas judías para iniciar la lectura de los textos sagrados (Torá y Tanaj). 

El sonido de la trompeta anuncia la presencia y la intervención de Dios en la historia del hombre.

En el silencio "como de media hora" del séptimo sello, se les entregan siete trompetas (shofar) a los siete ángeles que están delante de Dios, es decir, a los arcángeles que están en su presencia y a quienes Dios siempre les encarga la misión de anunciar solemnemente Su intervención en la historia del hombre.

El Incienso

Durante el lapso entre la entrega de las trompetas (Ap. 8,2) y el comienzo de su toque (Ap. 8,6), otro ángel ofrece incienso sobre el altar de oro (Ap. 8, 3-5), es decir, ofrece  los méritos de Cristo y nuevas oraciones y alabanzas a Dios, y se unen a las plegarias de los santos del cielo para presentárselas todas en una a Dios. Es la comunión de los santos.

El ángel llena el incensario de fuego del altar y lo arroja a la tierra y hubo truenos, voces, relámpagos y un terremoto, Dios se manifiesta.

La Misericordia de Dios quiere esperar un poco más para que la humanidad se arrepienta y se convierta, pero Su Justicia exige Su intervención.

Los siete ángeles, sucesivamente, comienzan a tocar las trompetas...

Las siete trompetas

Capítulos 8-11

Las primeras cuatro trompetas (igual que los primeros cuatro sellos) forman un solo bloque, pero junto con las siguientes, rememoran las plagas de Egipto del libro del Éxodo y narran las consecuencias del Imperio del Imperio del mal en nuestras vidas: maldad y caos.



El 1º ángel toca la 1ª trompeta (destrucción de la vida vegetal de la tierra) y cae granizo, que simbolizaría la frialdad ante la Buena Nueva, el Evangelio, y fuego mezclado con sangre, que representaría que, por la crucifixión de Jesucristo, la tercera parte de la tierra (=paganos y gentiles)de los árboles (=familias y tribus) y toda la hierba verde (=judíos fieles) se abrasó, es decir, que sólo unos pocos se convirtieron y se purificaron.

El 2º ángel toca la 2ª trompeta (destrucción de la vida animal del mar) y una inmensa montaña de brasas cae sobre el mar (=pueblo de Dios, Iglesia), refiriéndose a la persecución de los cristianos. La tercera parte del mar se convirtió en sangre, la tercera parte de los seres que viven en el mar murió y la tercera parte de las naves fue destruida, refiriéndose a los mártires.

El 3º ángel toca la 3ª trompeta (destrucción de la vida animal de ríos y lagos) y una estrella o meteorito, Satanás, cae sobre las aguas de los ríos y manantiales contaminándolos (aguas dulces=órdenes monásticas), la tercera parte de las aguas se convirtió en ajenjo, y mucha gente murió por las aguas, se refiere a la lucha contra las verdades de la fe a través de las herejías, simbolizado con el ajenjo, amargor que produce en la Iglesia. 

El 4º ángel toca la 4ª trompeta (destrucción de una parte de los astros) y la tercera parte del sol, de la luna y de las estrellas (autoridades políticas, económicas y religiosas) quedaron heridas de muerte y se oscurecieron, se refiere a que quienes iluminan a los hombres, pecarán,  y el día perdió una tercera parte de su esplendor, el mundo se llena de oscuridad y tinieblas por la gran apostasía, que hace abandonar a muchos la fe.

Recordemos que en la época de la escritura del Apocalipsis, la capital del "Imperio" era Roma, la ciudad de la luz, que se viene abajo y el Imperio "cae" motivado por el caos de la irrupción de los pueblos bárbaros.

De la misma forma que todos nosotros estábamos representados en las siete Iglesias de los capítulos 2 y 3, también lo estamos en las siete trompetas de los capítulos 8 al 11.

Son las consecuencias en nuestras almas cuando adoramos a la Bestia, el mundo se viene abajo y nuestras almas se oscurecen por el pecado. 

Cuando todo es caos y tinieblas, cuando no distinguimos el bien del mal, es cuando más actúa Satanás. Por eso, siempre antes de atacar, el demonio "prepara el terreno".

Es el inicio de la quinta trompeta: "Comienza el primer 'ay' ".

El 5º ángel toca la 5ª trompeta (tortura de una parte de la humanidad) y a la estrella que había caído del cielo a la tierra, se refiere a Lucifer, (Juan no le ve caer sino que ya le ve precipitado en la tierra), se le da la llave del pozo del abismo, el demonio actúa en la tierra con todo su poder maléfico

Al abrirlo, sale una humareda que oscurece todo, que significa mentira, tentaciónconfusión y división, con el que pretende destruir la moral (inmoralidad social, política y económica) y hacer el máximo daño espiritual entre los no creyentes y también, entre el pueblo de Dios, penetrando dentro de la Iglesia (inmoralidad religiosa). 

Y lo hace para no ser descubierto en medio del humo. Una vez inundado el mundo con la mentira, Satanás ataca.

El peligro no es el humo, sino la antesala del daño: Del humo salen langostas (por eso son "hijas del engaño") que infectan toda la tierra, propagación de demonios y fuerzas diabólicascon poder como el de los escorpiones, que envenenan a la humanidad con falsedades y mentiraspara atormentarlos durante cinco meses, el tormento es el pecado, con sus tres fases: engaño y seducción, el propio acto de pecar y, finalmente, sus consecuencias, que son siempre dolorosas. 

-Se les ordenó que no hicieran daño a la hierba, al verde y a los árboles (lo que florece y da fruto, los cristianos), sino solamente a los hombres que no tuvieran la señal de Dios en la frente, es decir, a los no cristianos, pero no para matarlos.

-Los hombres buscarán la muerte, pero no la encontrarán; desearán morir, pero la muerte huirá de ellos, las consecuencias del pecado: mala conciencia y remordimiento de los que se dejen "picar" y envenenar por el pecado.

Las langostas son una invasión letal cuyo objetivo es la seducción del hombre para su exterminio, es decir, la 2ª muerte. 

Juan describe estas langostas como representación de la inmoralidad sexual, como "todo apariencia". Todo es como...parece como...pero no lo son:

-aspecto como de caballos preparados para la guerra, se mueven con gran decisión y rapidez para destruir la fe.

-coronas que parecen de oro en la cabeza, poder político y religioso que parecen cumplir la voluntad de Dios pero que, sin embargo, propagan el mal.

-sus rostros como rostros de seres humanos, presentan un cierto humanismo como atractivo, pero no son hombres, son demonios.

-sus cabellos son como los de mujer, atraen con seducciónsensualidad y lujuria 

-dientes como de león, matan, trituran y devoran con calumnias y difamaciones

-corazas como de hierro, parecen seguir la verdad del Evangelio pero se obstinan en cambiarla o negarla. 

-el ruido de sus alas como el ruido de carros con muchos caballos que corren al combate, diseminan mucho mal y lo hacen con rapidez y destreza (instituciones de adoctrinamiento y medios de comunicación). 

-colas como aguijones de escorpiones donde reside su poder para dañar a los hombres, producen mal físico y espiritual a los que se mantienen fieles a Dios e intoxican con el veneno de la tibieza a los que se sí se dejan influenciar por ellos.

-durante cinco meses, poder limitado para hacer el mal.

-tienen como rey al Ángel del abismo, Satanás.

-en hebreo su nombre es Abaddón y en griego Apolíon, que en latín se traduce como "Destructor"o"Exterminador". Estos nombres son la personificación de la muerte espiritual (en pecado) que hace referencia al 4º jinete del 4º sello, el caballo amarillento, cuyo nombre es "Muerte", que podría simbolizar también a Satanás.

En el Antiguo Testamento, Abaddón hace referencia al abismo insondable llamado Sheol o lugar de destrucción o reino de los muertos (Salmo 16, 10). 

Sinónimos de Sheol (hebreo) referidos en el Nuevo Testamento son:

-Hades. Término griego que evoca al Tártaro heleno: una mazmorra profunda y sombría de tormento y sufrimiento. (Mateo 11,23; 16,18; Lucas 10,15; 16,23; Hechos 2,27).

LA BESTIA SALVAJE Y LAGO DE FUEGO – Vigilante paras los Testigos ...-Gehena. Término hebreo que evoca al Ge Hinnomo o valle de Hinón, situado entre el Monte Sion y el valle de Cedrón, en Jerusalén, donde se incineraba la basura (Mateo 5,22; 7,13; 10,28; 23,33; Marcos 9,43-45; Lucas 16,23-26: Santiago 3,6).

-Lago de fuego y azufre. Término que hace referencia a un lugar de tormento eterno. (Mateo 18,8; 25,46; Marcos 9,45-46; Lucas 16,24;  2 Tesalonicenses 1:8-9; 2 Pedro 2, 4; Apocalipsis 19,20; 20,10-15; 21,8).

-Abismo o Infierno. Término latín que evoca un lugar inferior, subterráneo o profundo de tortura eterna. (Mateo 5,29; 10,28; 16,18; 23,15; 25,41; Lucas 8,31; 16,23-24; Romanos 2,12; 8,1; 6,23; Apocalipsis 9,1-2 y 11; 17,8; 20,10)

Todos estos términos hacen referencia a la destrucción eterna, sin ninguna posibilidad de resurrección. 

"El primer 'ay' ha pasado; quedan todavía dos más"
(Apocalipsis 9,12)

Es el inicio de la sexta trompeta: "Comienza el segundo 'ay' ".

El 6º ángel toca la 6ª trompeta (destrucción de un tercio de la humanidad) y se ordena soltar los 4 ángeles que estaban a la orilla del Éufrates, la totalidad de las huestes infernales:
-su ejército de caballería constaba de 200 millones, son una invasión de enorme cantidad y que se mueve con rapidez.

-llevan corazas de color de fuego, usarán la violencia.

-de color jacinto (celeste), harán prodigios y milagros aparentes, confundiendo a las personas y disfrazándose de ángeles de luz.

-de color azufre, usarán espiritismos, brujerías y hechicerías

-Los caballos tienen cabeza como de leones, aliados con los ricos, los poderosos, los sabios y los famosos, quienes usarán su autoridad, fuerza y prestigio.

-para que puedan atacar a la tercera parte de los hombres, para intentar destruir a los que se mantienen firmes y fieles. 

-y de sus bocas sale fuego, humo y azufre, atacarán a la Iglesia (fuego), con mentiras y engaños (humo) y espiritismos y hechicerías (azufre). 

-La tercera parte de los hombres fue exterminada, hundirán en la muerte del pecado a algunos, y perderán la gracia

-Las colas de los caballos tienen cabezas parecidas a las serpientes, los ricos y poderosos usarán a gente sencilla del pueblo para hacer pecar a los tibios.

-Los demás hombres que no fueron exterminados por estas plagas no se arrepintieron de las obras de sus manos, ni cesaron de adorar a los demonios y a los ídolos... ni de sus homicidios, ni de sus maleficios, ni de su lujuria, ni de sus robos, a pesar de todos los medios que Dios pone a su alcance, la mayoría de las personas desean seguir con sus obras mundanas sin arrepentimiento alguno.

Estas palabras hacen referencia al libro de Zacarías 13,7 donde advierte: "Hiere al pastor y las ovejas se dispersarán, yo volveré mis manos aún contra los más débiles...dos terceras partes perecerán, y quedará la otra tercera parte". La herida del pastor simboliza el humo de Satanás, la Jezabel idólatra, que, infiltrados en la Iglesia, causan confusión y división. 

Ante la "sordera" del hombre y antes de sonar la séptima trompeta, Dios, en su infinita paciencia, envía ayuda a los hombres desde el cielo a través de su Iglesia:
-Otro ángel vigoroso baja del cielo, personifica la ayuda que envía Dios  para contrarrestar el mal de la gran apostasía. Son personas que dan testimonio de su conversión, de la intervención y de la acción de Dios en sus vidas.

-con un arco iris rodeando su cabeza, simbolizan los siete dones del Espíritu Santo, que une la Iglesia triunfante a la Iglesia militante, que aplaca la cólera divina y que viene con el esplendor de Dios y su nueva alianza (ver Apocalipsis 4, 3).

-con cara como el sol, iluminarán con la fe, y piernas como columnas de fuego, aterrarán a los malvados. 

-con el libro del Evangelio abierto en sus manos, puso un pie en el mar y otro en la tierra, habrá una nueva evangelización a cristianos y no cristianos, es decir, a toda la humanidad. 

-Y gritó con voz potente, como el rugido del león, con autoridad

-Cuando gritó, los siete truenos hicieron oír sus voces, habla el Espíritu Santo

-Cuando hablaron los siete truenos, me dispuse a escribir; pero oí una voz del cielo, que decía: Ten en secreto lo que han dicho los siete truenos, y no lo escribas, el mensaje del Espíritu Santo se mantiene oculto y será revelado en el momento en que vaya a suceder.

El ángel alzó la mano derecha hacia el cielo y juró por aquel que vive por los siglos de los siglos: Se acabó el plazo. 

En este tiempo de urgencia, los cristianos fieles tienen que comerse la palabra, alimentarse espiritualmente de la Sagrada Escritura, de la Palabra de Dios.
Urge transmitir otra vez el mensaje evangélico del amor, aunque le sea amarga en el estómago, que significa que es necesario vivir primero la Palabra y esto acarrea rechazosufrimiento y persecución (ver Salmo 57 y 85), aún así, los cristianos deben amar también a sus enemigos. La amargura viene también al ver que el tiempo se acaba y las personas, haciendo uso de la libertad que Dios no puede quebrantar, le rechazan.

-pero dulce en la boca, que representa el encuentro con Jesucristo resucitado y la alegría de hablar con Él y testimoniarle a otros.

-Es preciso que profetices de nuevo sobre muchos pueblos, naciones, lenguas y reinos, es una llamada final a todos nosotros, a evangelizar a todas las personas que están fuera de la Iglesia.

Cuando suene la 7ª trompeta del 7º ángel, Dios desvelará todo su plan secreto de salvación, el misterio de dios que anunció a sus profetas, que significa que llega el Juicio final y, aunque como veremos, se habla de las copas de la Ira de Dios, Él lo que quiere a toda costa es la conversión del hombre. 

"El segundo ay ha pasado; mira que el tercero va a llegar pronto"
(Apocalipsis 11,14)



Bibliografía:

-"El Apocalipsis" (de Adrienne Von Speyr, por Hans Urs Von Balthasar).
-"Para leer el Apocalipsis" (Jean-Pierre Prévost, Editorial Verbo Divino, 1991).
- "La Cena del Cordero" (Scott Hahnn, Editorial Patmos, 2001).
-"El Apocalipsis de San Juan" (Emilio Aliaga Girbés, Editorial Verbo Divino)

martes, 5 de mayo de 2020

EN OCASIONES, VEO MUERTOS

Dawn Of The Dead Trailer - FILM.TV
"Conozco tus obras, 
tienes nombre como de quien vive, 
pero estás muerto."
(Apocalipsis 3,1)

"En ocasiones, veo muertos"...esta célebre frase de la película "el sexto sentido" está hoy de plena actualidad. Basta echar un vistazo a nuestra sociedad y a nuestras comunidades parroquiales, para ver muertos. Muertos en vida... 

Jesucristo, cuando escribe a la Iglesia de Sardes en el libro del Apocalipsis, habla acerca de la muerte espiritual. Y es que, por desgracia, muchos cristianos de hoy se han convertido en zombis espirituales. No están realmente muertos, ni realmente vivos. 

La naturaleza es una asesina en serie" comentario a Guerra mundial ...Contagiados por un virus invisible, han muerto a la vida para "resucitar" a la muerte y propagar la guerra mundial Z. 

Recuerdo especialmente una escena de la película con este nombre, en la que una soldado del ejército israelí es mordida en una mano por un zombi. El protagonista, sin mediar, palabra, le corta la mano y la salva de la infección. 

Algo que que me lleva a meditar las palabras de Jesús: "Si tu mano te induce a pecar, córtatela: más te vale entrar manco en la vida, que ir con las dos manos a la gehenna, al fuego que no se apaga" (Marcos 9, 43; Mateo 5,30).

Los zombis espirituales no son conscientes de que están muertos. Viven en las tinieblas del sepulcro aunque creen estar fuera de él, en la luz de Cristo. Por sí mismos, no son capaces de despertar de su letargo, ni de regenerar sus células muertas por otras vivas, para volver a lo que fueron una vez.

Cadáveres apóstatas que han olvidado el Amor Primero y buscan desnaturalizar la fe apostólica, devorando su esencia y tratando de pervertirla. Su guerra no es interior porque carecen de conciencia, sino exterior donde poder encontrar "carne fresca". Su objetivo: dar muerte al Cuerpo Místico de Cristo. 

Masas putrefactas, de vidas interiores vacías y en proceso de descomposición, que muestran a la luz su corrupción interna. "Su carne se pudrirá cuando todavía estén vivos; sus ojos se pudrirán en sus cuencas; sus lenguas se pudrirán en sus bocas" (Zacarías 14,12).

Psicópatas del impulso, cuyos corazones bombean sangre putrefacta sentimental. Sus cerebros han transformado la razón por instinto. Sólo responden a lo que sienten, como si estuvieran en un estado de coma permanente, en el que sólo buscan satisfacer sus necesidades primarias.

Hordas de caníbales espirituales que arrastran los harapos de sus culpas y muestran las pústulas de sus pecados. Emiten sonidos guturales extraños creyendo evangelizar y persiguen a los vivos para devorarlos y satisfacer su ansia caníbal. 

Espectros de la oscuridad que salen de sus tumbas sólo para infectar su "no-vida" a otros, con tan sólo un mordisco, con un simple fluido. Siguiendo su impulso maligno, propagan rápidamente a otros el virus con sus comentarios, rumores, chismes, mentiras y falsas doctrinas. 
Ser el ángel de alguien
Portadores de un mal letal, atacan siempre en grupo para hacer el mayor daño posible. Arrastran sus pies pero no se dirigen hacia ninguna parte. Marchan con lentitud y torpeza siguiéndose los unos a los otros pero sin liderazgo, sin dirección y sin sentido. 

Cuerpos sin alma, que caminan a la deriva y a paso lento, pero no se fatigan porque no respiran. "Walking deads" que cambian de rumbo ante cualquier sonido, ante cualquier nueva idea, ante cualquier doctrina novedosa.

Almas sin pena ni gloria, que buscan alimentarse de cuerpos sanos, pero no "digieren" la doctrina porque oyen, pero no escuchan la Palabra. Su tibieza les va alejando del "Viviente" porque no siguen a Cristo ni dejan que "Sus cicatrices les curen." (Isaias 53, 5).

Espíritus cauterizados, zombis filosóficos sin conciencia que rechazan la vida pero que no encuentran la muerte "y en aquellos días los hombres buscarán la muerte y no la encontrarán; desearán morir, y la muerte huirá de ellos." (Apocalipsis 9,6). 

Si no lo remediamos, caminamos hacia un destino antropófago en el que todos nos devoraremos unos a otros sin piedad. Pero la buena noticia es que hay cura y tratamiento para el virus Z:

"¡Huesos secos, escuchad la palabra del Señor! Esto dice el Señor Dios a estos huesos: Yo mismo infundiré espíritu sobre vosotros y viviréis. Pondré sobre vosotros los tendones, haré crecer la carne, extenderé sobre ella la piel, os infundiré espíritu y viviréis. Y comprenderéis que yo soy el Señor...ven de los cuatro vientos, espíritu, y sopla sobre estos muertos para que vivan" (Ezequiel 37,6-7).

"¡Revivirán tus muertos, resurgirán nuestros cadáveres!" (Isaías 26,19).