¿QUIÉN ES JESÚS?

La vida de Jesús siempre ha suscitado preguntas a lo largo de los últimos dos mil años.

¿Cómo pudo un carpintero que fue ejecutado por los romanos convertirse en el hombre más famoso de la historia?
¿Fue Jesús alguien verdaderamente real?
¿Cómo puede Dios ser un hombre al mismo tiempo?
¿De qué manera podría esto tener algún sentido para mi vida?

Estas son algunas preguntas, pero aquí tienes un espacio para formular las tuyas.

sábado, 13 de junio de 2020

APOCALIPSIS 14-15: EL ANUNCIO DEL JUICIO Y LA VENDIMIA DE LA TIERRA

Lo urgente y lo importante | Formación Humana
"Miré y he aquí que el Cordero estaba de pie sobre el monte Sión, 
y con él ciento cuarenta y cuatro mil 
que llevaban grabados en la frente su nombre 
y el nombre de su Padre."
(Apocalipsis 14,1)

Continuamos esta serie de artículos, extensa pero apasionante, sobre el libro del Apocalipsis, y como hemos venido observando, los acontecimientos que nos narra San Juan (arrebatado en espíritu), no siempre siguen un orden cronológico pero sí un orden lógico y detallado.

Este método, "la ley de la recapitulación", es la firma original, el sello personal del Espíritu Santo, impreso desde el primero hasta el último libro de la Palabra de Dios. Por ejemplo, en el capítulo 1 de Génesis, se nos relata La Creación durante siete días y en el capítulo 2, el Espíritu Santo vuelve a hablar de la creación del hombre, pero esta vez agrega más detalles. En el libro del Éxodo, encontramos las leyes de Moisés, y algo más adelante, en el libro de Deuteronomio, se da la interpretación de la Ley, con cuarenta años de experiencia en el desierto, y con muchos detalles añadidos. En el Nuevo Testamento, tenemos cuatro evangelios, no  uno ni dos, porque el Espíritu Santo ha considerado que era necesario presentar con distintos detalles los muchos aspectos de la vida y persona de Jesucristo.

El triunfo de Cristo y su ejército

Comienza el capítulo 14, con el Cordero de pie, Jesús en posición de combate, sobre el monte Siónen el corazón de la Nueva Jerusalén, sobre el que se levanta el templo espiritual, la morada de Dios en la tierra, acompañado de los 144.000... Estos son los que no se contaminaron con mujeres, porque son vírgenes. Estos son los que siguen al Cordero adondequiera que vaya. Son los sacerdotes y  los  consagrados de todos los pueblos y razas, y de todas las épocas; Los compañeros del Cordero que están dispuestos al sacrificio, la penitencia y la vida sacramental, distintos de la gran muchedumbre que les acompaña a continuación. 
- también como una voz del cielo, como voz de muchas aguas y como voz de un trueno poderoso; y la voz que escuché era como de citaristas que tañían sus cítaras. Son los dos coros de la liturgia celeste: la Iglesia Triunfante a la que se une la Militante, hasta completar el número total. 

-Cantan un cántico nuevo frente al trono, perseveran y son fieles a los sacramentos y a la adoración, que sólo ellos conocen, guiados personalmente por el Espíritu Santo, pasan por una persecución diferente a la que sufrieron los cristianos en siglos precedentes. 

-tenían escrito en las frentes su nombre y el nombre de su Padre, es decir, que obedecen a Dios Padre, y siguen la cruz de Cristo y su ley. Están marcados y protegidos por la cruz y no por el 666.  Obedecen a Cristo y no al Anticristo; son los que han vencido la impureza y la concupiscencia de la carne, pues esta será la herida más insidiosa de las fuerzas del mal, que tratarán de pervertir el corazón interior de la Iglesia y convertirlo en una inmensa Sodoma. El Cordero tiene el poder de borrar la marca de la Bestia de todos aquellos que se convierten.

-en su boca no se halló mentira. Son intachables, se han guardado de las mentiras y las herejías, ligadas casi siempre a la impureza de la carne; han sido fieles y han perseverado hasta el punto de estar dispuestos a morir por preservar su alma (Mateo 16, 25). 

El mensaje del Apocalipsis es que la vida del cristiano es una vida litúrgica, una vida eucarística encaminada a las bodas del Cordero, en las que ofrece el culto a Dios mediante el sacrificio y ofrecimiento de sí mismo, por la salvación de su alma y las de los demás. Aquel que no entra en la liturgia celeste, está fuera.

El anuncio del juicio de Dios

Hasta aquí, San Juan ha hablado del pasado y del presente pero ahora, se dispone a hablar del futuro. Pero no para decirnos cuándo van a ocurrir las cosas sino para que discerniendo lo que va a ocurrir, para que nos convirtamos definitivamente a Dios.

Es el momento del Señor para hacer justicia. Dios va a juzgar al Imperio pero mientras llega ese momento, envía a tres ángeles para que, aquellos que adoran a la Bestia, se conviertan. La misericordia de Dios sigue dando más oportunidades al hombre. Es la última llamada.
Un primer ángel (el enviado de Dios para ese tiempo) anuncia la predicación y nos invita a la última conversión, que vuela por mitad del cielo, es decir, que actúa según la voluntad de Dios, y lleva un evangelio eterno para anunciarlo a los habitantes de la tierra, a toda nación, raza, lengua y pueblo, buenas noticias e inmutables,  dirigidas a todos los habitantes de la tierra, que nos recalcan las palabras de Mateo 24,14: "Y se anunciará el evangelio del reino en todo el mundo como testimonio para todas las gentes, y entonces vendrá el fin". El ángel exhorta a temer a Dios (a no ofenderle), a glorificarle y a adorarle como el Señor y Hacedor de toda la creación y nos avisa de la hora del juicio

Un segundo ángel anuncia la caída de Babilonia la Grande, la gran ramera, la corrupta, la idólatra, la que pervierte a los hombres y los seduce para que la adoren, la que se embriaga de poder y de éxito, frente a Jerusalén, que es la novia del Corderoaquella que acoge a todos los que no se han vendido a ningún precio. Está visión está tomada de Isaías 21, 9 y Jeremías 51, 8 que predecían la caída de la ciudad caldea. San Juan nos anuncia la caída de la Bestia para que nos separemos de ella, si no queremos caer con ella.

Un tercer ángel anuncia el destino de quienes adoran a la Bestiano tienen descanso ni de día ni de noche, la "Pax romana" (nuevo orden mundial de paz y estabilidad) ofrecida por el "Imperio" es un engaño del Dragón que, a lo largo de la historia, ha prometido al hombre, sabiendo que es mentira, y el de los que mueren en el Señordescansan de sus fatigas, porque sus obras los acompañan. Los santos, los que escuchan el evangelio eterno del primer ángel, cumplen todos los mandamientos y resisten hasta el final, descansarán en paz. ¡Aquí se requiere la paciencia de los santos, es de nuevo, una exhortación a perseverar sin dejarnos engañar o seducir por la Bestia y a desenmascarar el mal.
EL RINCÓN DEL TEÓLOGO ADVENTISTA: El mensaje de los tres ángeles ...

La siega y la vendimia de la tierra

Tras estos tres últimos avisos de los ángeles, el cielo se dispone a hacer justicia. San Juan nos muestra esta escena que toma de otra similar de su Evangelio, la conocida como la vid y los sarmientos. 

Es la hora de la justicia y nos conmina a los cristianos a no tener miedo a la muerte, pues el premio eterno será de inmediato. Es el momento de la cosecha y la vendimia de la tierra que recoge a los justos para preservarlos de la ira contra el Imperio que está a punto de desencadenarse con las siete copas.

Aparece una nube blanca, que es la Iglesia y sentado sobre ella, como un hijo del hombre, Cristo con una corona de oro, Rey y Señor de su Iglesia, pero ahora ha cambiado el cetro por una hoz afilada, su Justicia, con la que va a separar el trigo de la cizaña, el bien del mal. Hace referencia a Mateo 24,30-33 que anuncia la segunda venida de Jesucristo donde aparece el Hijo del Hombre, viniendo sobre las nubes con gran poder y gloria, que enviará a sus ángeles con un gran toque de trompeta y reunirán a sus elegidos de los cuatro vientos, de un extremo al otro del cielo, para, a continuación, recordarnos la parábola de la higuera y la llegada del verano. 
Sale otro ángel del santuario y con gran voz, clama al que estaba sentado sobre la nube"Mete tu hoz y siega; ha llegado la hora de la siega, pues ya está seca la mies de la tierra". Un ángel le dice a Cristo que la cosecha está lista y le pide que comience a hacer justicia en referencia a Joel 3,13 y Marcos 4, 29. El tiempo está cumplido, el fruto está maduro y tiene que ser recogido

El que estaba sentado encima de la nube metió su hoz sobre la tierra y la tierra quedó segada. Jesucristo cumple lo que estaba escrito: separa el bien del mal. Comienza la siega que, bíblicamente, tiene siempre un sentido positivo puesto que para los judíos es la fiesta más importante del año. La Escritura utiliza, con frecuencia, los símiles agrícolas, propios de la cultura judía y así, Cristo es el segador, quien imparte justicia, y también el vendimiador, quien recoge a los justos (Joel 2, 2 y 4,12; Isaías 63, 1-6). Cristo recoge a los 144.000 para preservarlos.

Otro ángel salió del santuario del cielo, de la presencia de Dios, llevando él también una hoz afilada. Y del altar salió otro ángel, el que tiene poder sobre el fuego, posiblemente, se trate de Uriel, el arcángel "regente del sol" o "fuego de Dios", quien tiene también la llave que abrirá el Infierno al Final de los Tiempos. El fuego simboliza el poder purificador de Dios que consume lo perecedero y acrisola lo imperecedero, el fuego que limpia toda maldad, quien grita con una gran vozpoder y autoridadal ángel que tenía la hoz afilada para que vendimieal que Dios le ha ordenado recoger la uva madura, es decir, hacer justicia.
La vendimia se realiza en dos fases: primero, se recoge la uva madura (los justos) y se pone aparte para llevarla al lagar y extraer el néctar; y a continuación, se quitan los sarmientos, las malas hierbas (los malvados) y se queman.  Sin embargo, San Juan está haciendo referencia sólo a los malvados.

El ángel metió su hoz en la tierra y vendimió la viña de la tierra, la tierra, en la Biblia, simboliza a los que están dentro de la Iglesia, y echó las uvas en el gran lagar de la ira de Dios, que son juzgados. Pisotearon el lagar fuera de la ciudad, los confronta y purifica fuera de Jerusalén, de la Iglesia, fuera de la fe,  y salió tanta sangre del lagar, tanta persecución y martirio, de los compañeros del Cordero, que subió hasta los frenos de los caballos, indica la profundidad de un metro, aproximadamente, en un radio de mil seiscientos estadios, 320 kms, en referencia a la distancia entre Dan y Beerseba, es decir, la extensión de toda Palestina.

Los justos están purificados en el lagar de Dios y preservados por Él, del vertido de las copas de Su ira.

El cántico de los vencedores

El capítulo 15 es un intermedio, un interludio antes del castigo de los impíos. El Espíritu Santo vuelve a recapitular. San Juan ve otro signo, grande y maravilloso, aparecen 7 ángeles, que reciben de manos de uno de los vivientes, las 7 copas con las plagas de la ira de Dios, castigos de Dios que sobrevendrán a los adoradores de la Bestia
-
Vi como un mar de vidrio, el trono de Dios, en calma, equilibrio y paz, mezclado con fuego, purificado, y los vencedores de la bestia, de su imagen y del número de su nombre, los que le pertenecenestaban de pie sobre el mar cristalino con las cítaras de Dios, los mártires del Anticristo, de pie, listos para participar en el combate, intercediendo por los que están en la tierra.

-Y cantan el cántico de Moisés y el del Cordero, anticipo de triunfo (los cánticos de victoria y liberación del cautiverio egipcio en Éxodo 15,1-21, y del cautiverio del pecado en la cruz en Deuteronomio 32, 1-43). Se abre el santuario de la Tienda del Testimonio, manifestación de Diosy salieron los 7 ángeles vestidos de lino puro, con funciones reales, y ceñidos alrededor del pecho con cinturones de oro, sacerdotales.

-Entonces uno de los cuatro seres vivientes dio a los siete ángeles siete copas de oro llenas de la ira de Dios, el clamor de los santos en Apocalipsis 6, 10 es, por fin, atendido.

-Y el santuario se llenó de humo procedente de la gloria de Dios y de su poder, símbolo del poder y la gloria de Dios, tomado de Isaías 6,4.

-y nadie puede entrar en el templo hasta la consumación de las siete plagas de los siete ángeles, es tiempo de purificación para la tierra (Apocalipsis 9, 6), en el que los vencedores del Anticristo, se postran ante el trono de Dios, le cantan alabanzas y anuncian los castigos que se sobrevienen sobre los que persiguieron la Iglesia de Cristo. Nadie puede entrar en el cielo hasta que se consuma la justicia divina.

La visión de las copas es una referencia a su utilización en el servicio sacerdotal del templo de Jerusalén en el Antiguo Testamento. El Sumo Sacerdote llevaba, un día al año, al "Santo", donde se encontraba el Arca de la Alianza, es decir, Dios mismo, una copa de sangre, símbolo del perdón de los pecados del pueblo.



Bibliografía:

-"El Apocalipsis" (de Adrienne Von Speyr, por Hans Urs Von Balthasar).
-"Para leer el Apocalipsis" (Jean-Pierre Prévost, Editorial Verbo Divino, 1991).
- "La Cena del Cordero" (Scott Hahnn, Editorial Patmos, 2001).
-"El Apocalipsis de San Juan" (Emilio Aliaga Girbés, Editorial Verbo Divino)

viernes, 12 de junio de 2020

ORIGEN DE LOS PUEBLOS Y NACIONES TRAS EL DILUVIO

"Estos son los descendientes de los hijos de Noé, 
Sem, Cam y Jafet, 
nacidos después del diluvio" 
(Génesis 10,1)

Hoy repasamos los capítulos 10 y 11 de Génesis, donde se enumeran las genealogías de los orígenes de los diferentes pueblos mencionados a lo largo del Antiguo Testamento, todos descendientes de los hijos de Noé, después del Diluvio. 

La historia de la humanidad es la historia de la continua infidelidad del hombre a Dios, el misterio de la iniquidad, originado desde Adán y Eva hasta el diluvio, y desde Babel hasta nuestros días, en una reiterada sucesión de adulterios.

La Pesha, es decir, el pecado, es el acto de rebelión e infidelidad del hombre hacia Dios que supone una ruptura del pacto o alianza entre Dios y los hombres, una traición al Creador y una transgresión de sus mandamientos.

A su vez, el Awon es la situación desordenada y merecedora de la pena que supone una desviación, un error en la dirección hacia el propósito creador, una "pérdida del norte" del hombre en su relación con Dios.

El pecado es, además, una ofensa personal a Dios, una oposición a Él por la violación de su Ley. Es, también, una ruptura o desviación infiel y adúltera, ingrata y desconfiada, injusta y traicionera.

Dios envió el diluvio para erradicar esta iniquidad del mundo, pero transcurridos tan sólo unos trescientos años, la descendencia de Cam Sem y Jafet volvió a caer en la infidelidad a Dios con la construcción de la torre de Babel.
Ab laeva rite probatum: La Torre de Babel

El capítulo 10 de Génesis nos relata la descendencia de los hijos de Noé, que dio lugar a todos los pueblos sumerios del Medio y Próximo Oriente, asentados alrededor de lo que fue el jardín del Edén, y de quienes surgieron el resto de pueblos.
Hijos de Noé Parte 6: Estándares y estereotipos - Unveiling ...
Estas son las familias de Cam, Sem y Jafet, los hijos de Noé, por genealogías y naciones, a partir de las cuales se ramificaron todos los pueblos de la tierra:

Hijos de Jafet
(Génesis 10, 1-59)
                              
Jafet, de cuyo nombre deriva Júpiter, se expandió por toda Europa y tuvo siete hijos: 

-Gomer, Primogénito de Jafet, se instaló en Europa Central, Francia, noreste de España y las Islas Británicas, dando lugar a los galos, bretones y celtas. Tuvo tres hijos: 

Asquenat se estableció en Europa del Este y dio origen a los sajones y teutones (Alemania), que más tarde, daría lugar a los godos y visigodos.

Rifat, en lo que hoy es Suiza.

Togarma, en Turquía, Armenia, Kazakstán, Azerbaiyán y Turkmenistán, dando origen a los cilicios, habitantes de la región cuya capital era Tarso, la ciudad natal de San Pablo, y que son mencionados como suministradores de caballos para el comercio de Salomón con Siria en 1 Reyes 11,28. 

-Magog. Se estableció en las montañas del Cáucaso en el sur de Rusia y dio origen a los mongoles, a los pueblos eslavos y a los escitas, pueblo nómada de las estepas, cuyo territorio abarcaba desde el sur de Rusia hacia el noroeste de Persia en el siglo VII a.C.. Allí se hicieron vecinos y aliados de los mineos y como se menciona en Jeremías 51,27, formaron una alianza para luchar contra Babilonia: urartios (Ararat), mineos (Mini) y escitas (Askenaz). Aunque por un tiempo rivalizaron con los medos, finalmente llegaron a formar parte de su imperio y del de los arquitas, quienes les sucedieron. 

-Madai. Se estableció en la India y parte de su linaje, en Persia (Irán) dando lugar a los persas, pueblo que venció a los babilonios en el siglo VI a.C. y prosiguió hasta el establecimiento de un imperio que se extendió desde la India hasta el Mar Egeo y Egipto

Sus capitales principales eran Pasargadas y Persépolis en las montañas del sudeste de Persia, y en la antigua ciudad elamita de Susa, en la planicie baja. Su imperio, administrado con liberalidad, duró hasta que se hizo parte del imperio aún mayor de Alejandro Magno en el siglo IV a.C.

-Yaván. Se estableció en Italia y sureste de Francia. De su nombre derivan Giovanni, Iván, Juan, John, Jean, Joan, etc. Tuvo cuatro hijos:  

Elisa (Eliseo) el primogénito que, junto a sus descendientes, se asentaron en la región de Grecia y crearon los pueblos helénicos.

Tarsis se fue a España y Portugal y dio origen a los  pueblos ibéricos

Quitín se estableció en Chipre. Los chipriotas son mencionados en Génesis 10,4 y en Ezequiel 27,7 como Elisa, o Quitín (Génesis 10,4 y Números 24,24), nombre dado a la isla en Isaías 23,1, pero se la califica de costas en Jeremías 2,10 y en Ezequiel 27,6, lo cual sugiere una extensión a las regiones cercanas a tierra firme. Este linaje dio lugar a los fenicios, habitantes de la costa del levante al norte de Palestina, de lengua semítica. Famosos por su gran comercio por el Mediterráneo oriental a partir del siglo XI a.C., sus principales ciudades eran Tiro, Sidón y Biblos (1 Reyes 5,18 y Ezequiel 27,9). Su nombre en griego era fainiké, que significa tierra del tinte púrpura. Se llamaban a sí mismos cananeos, pues descendían de éstos, y aparecen en 1 Reyes 5,6 como tirios o sidonios.

Dodanim se estableció en las islas del Mar Egeo (Rodas). Los descendientes de Quintin y Dodanim son conocidos como pueblos del Mar, junto a los descendientes de Misráin, hijo de Cam.

-Tubal. Se estableció en el norte de Rusia (Siberia) y en Italia. Dio origen a los ítalos.

-Mescec. Se instaló en el oeste de Rusia, Ucrania, Georgia. De su nombre se deriva la capital Moscú. Dio origen a los hunos.

-Tirás. Se estableció en Escandinavia (Suecia, Noruega, Finlandia, Dinamarca) y dio origen a los vikingos y tracios (Bulgaria y Rumanía).

Hijos de Cam
(Génesis 10, 6-20)
                         Ham

Cam, el más inquieto de los hijos de Noé, tras el diluvio se marchó a los confines de la tierra y tuvo cuatro hijos:

-Cus. Padre ancestral de Etiopía. Tuvo seis hijos: 

Seba, Javila, Sabta, Raama (que tuvo a Seba y Dedán), Sabteca, que se establecieron en África Central, Kenia, Camerún y el Congo 

Nimrod, quien reinó (1,480 al 1450 a.C.) en las ciudades de Babel, Érec, Acad y Calne, en la tierra de Sinar, en el valle del Tigris y Éufrates. De allí se marchó hacia Asur (Asiria) y fundó varias ciudades: Nínive, Rejobotir, Calaj y Resen. Fue quien ordenó la construcción de la torre de Babel y de donde provienen los arcadios

-Misráin. Es el antiguo nombre de Egipto. Origen de los lidios, pueblo de lengua indoeuropea que, desde el oeste de Asia Menor, avanzó hacia los territorios de Frigia, dando origen a los frigiosque ocuparon la parte centro-occidental de Asia Menor, después de la caída del poder hitita, estableciendo ahí un reino a principios del primer milenio a.C. 

Los frigios son identificados con el término Mushku de las inscripciones asirias y el Mesuc de la Biblia, quienes aparecen como un pueblo belicoso del norte (Ezequiel 32,26, 38,2-3, 39,1) y habitaron la isla de Creta, sede de la gran civilización minoica en los milenios III y II a.C. Se enfrentaron a Media, y sucumbieron ante Persia en el siglo VI a.C. 

Frigia fue invadida por los cimerios en el siglo VII a.C. y luego pasó a formar parte del reino de Lidia. Los lidios son la rama común de la que proceden los anamitas, leabitas, naftujitas, patrusitas, calusitas, y caftoritas, mencionados en Génesis 10,14, y de los que proceden los filisteos (Amós 9,7) conocidos como parte de los Pueblos del Mar, que emigraron al Cercano Oriente desde el Mar Egeo en los siglos XIV y XIII a.C. Fueron rechazados por Egipto y se asentaron en la costa sur de Palestina, desde donde amenazaron a los israelitas recién establecidos, hasta que finalmente fueron derrotados por el rey David, (2 Samuel 5,25) y asimilados por los israelitas, aunque tuvieron ciertas diferencia culturales (Nehemías 13,24 y 1 Macabeos 10,83-84). Un contingente de los filisteos llegó a formar parte de la guardia personal del rey David.
Un estudio revela que los Filisteos procedían de Europa | Arte ...
Sin embargo, los filisteos que tuvieron que ver con los Patriarcas (Génesis 21,26) fueron pueblos egeos anteriores, distintos de los de la Edad de Bronce tardía (1,250 al 1,150 a.C.). 

-Put. Se estableció en la actual Libia.

-Canaán. Se estableció en la zona de Israel y sus alrededores, en el centro de Oriente Medio. Procedentes de Canaán son también los hicsos, que se hicieron con el control del Bajo Egipto a mediados del siglo XVII a.C., conquistando la ciudad de AvarisPosteriormente tomaron la ciudad de Menfis y fundaron las dinastías XV y XVI. La duración de su dominio sobre Egipto fue de casi cinco siglos.

Canaán tuvo siete hijos: 

Sidón, su primogénito, de quien proceden los cananeos o cananitas, que se establecieron en Egipto e Irán; los amorreos, tribus nómadas muy belicosas que ocuparon SiriaCanaán y la región al oeste del río Éufrates, desde la segunda mitad del tercer milenio a. C. Llegaron a conquistar en dos ocasiones la ciudad de Babilonia. Adoradores de Baal; arvaditas, samaritas y jamatitas, que se establecieron en Palestina y Siria meridional, fundando una floreciente civilización urbana en el segundo milenio a.C., y cuyo territorio se extendía desde Sidón, en dirección a Guerar, hasta Gaza; y en dirección a Sodoma, Gomorra, Admá y Seboín, hasta LesaLa corrupta e idólatra región de Canaán que se cita en el Antiguo Testamento está ilustrada por textos hallados en la ciudad de Ugarit, la actual Ras Shamura. El hebreo es una lengua derivada del cananeo.

A Canaán, tierra de pecado, Dios la convirtió en tierra prometida para su pueblo Israel, prefigurando, en cierta forma, lo que ocurrió después con Corinto, de quien San Pablo dijo: "donde abundó el pecado, sobreabundó la gracia, para que, lo mismo que reinó el pecado a través de la muerte, así también reinara la gracia por la justicia para la vida eterna, por Jesucristo, nuestro Señor" (Romanos 5, 20-21)
Jet, de quien proceden los hititasque establecieron una civilización en el centro del Asia menor y dominó gran parte de Siria septentrional en los siglos XIV y XIII a.C. Su imperio fue destruido por los filisteos hacia el año 1,200 a.C. y parte del pueblo emigró al norte de Siria y dominó ciudades-estado como Cilicia. Estos pueblos, conocidos como ahora como neo-hititas o sirio-hititas, fueron los heteos bíblicos del tiempo de los reyes de Israel. Su ciudad más importante era Troya, invadieron Canaán, bajo control de Egipto, entre los años 1,370 al 1,336 a.C., estableciéndose al sur de dicho territorio. En este contexto se desarrollaron las narraciones del Éxodo. Algunos de sus descendientes se trasladaron al Este, al Lejano Oriente, a China y otros se asentaron en el sudeste asiático, como en Corea, Japón, Vietnam, Laos, Camboya, Birmania y Malasia. 

Jesubetde quien proceden los  jebuseos.

Guirgaset, de quien proceden los guirgaseos.

Hivisetde quien proceden los heveos, o horeos o hurritas o urartios pueblo norteño que emergió como potencia militar en la región de Armenia en el siglo IX a.C., convirtiéndose en una constante amenaza militar para los asirios. Se dice que el Arca de Noé encalló en el monte Ararat (Génesis 8,4), es decir, en algún lugar de lo que más tarde fue el Urartu, aunque no necesariamente en el Ararat actual, que sólo en fecha más tardía recibió este nombre. Se extendieron por el Cercano Oriente durante el segundo milenio a.C. y su ciudad más importante fue Nuzi, donde documentos del siglo XV a.C., atestiguan costumbres semejantes a las de los Patriarcas. Los descendientes de los hurritas, 

Arket, de quienes proceden los arquitas que poblaron inicialmente Siberia, luego cruzaron hacia América para convertirse en aleutianos y en tribus nativas americanas, y finalmente, dieron origen a los incas, mayas y aztecas. Algunos de ellos se abrieron paso a lo largo de la costa del Pacífico, donde se establecieron como los aborígenes de Australia.

Sinet, de quien proceden los sinitas, de donde recibe el nombre la península del Sinaí. Se dirigieron hacia el este, para instalarse en China (dinastía Xin). 

Hijos de Sem
(Génesis 10, 21-32)
                    

Sem, hermano mayor de Jafet y antepasado de todos los hijos de Eber, vivió más de quinientos años después del diluvio, fue el padre de los judíos y los árabes, y tuvo cinco hijos

-Elám, padre de los elamitas, vecinos orientales de los sumerios y babilonios. Su capital era Elam, la actual Khuzistán, en el sudoeste de Irán, que en aquella época se conocía como Persia. Según Hechos 2, 9, algunos peregrinos de Elam estuvieron en Jerusalén durante Pentecostés (Hechos 2,9).

-Asur, cuyo territorio, vecino a Babilonia, se encontraba al norte de Mesopotamia, dio origen a los asirios Durante el segundo milenio a.C. Asiria cayó bajo el poder de los amorreos, y desde aproximadamente 1,350 a.C. hasta 1,100 a.C. fue construyendo un potente estado que ejercía un considerable control. En este tiempo la capital fue Asur, pero en el 883 a.C. Asurbanipal II trasladó la capital a Kalhu, que en la Biblia consta como Calá y es la actual Nimrud.

Durante siglos los gobernantes asirios tuvieron contactos con Israel, hasta que Sargón II (721-705 a.C.) fundó una nueva capital en Dur-Sarrukín, la actual Korsabad. Su hijo Sanaquerib (704-681 a.C.) trasladó la capital a Nínive y allí residieron varios reyes hasta que en el año 612 a.C. fue destruida por los caldeos y los medos. En el año 722 a.C. el pueblo israelita fue desterrado a Nínive.

-Arfacsad engendró a Selaj y éste a Eber, origen de los hebreos, los caldeos, pueblo tribal que ocupó los pantanos del sur de Mesopotamia. Durante los siglos IX a.C. y VIII a.C. tuvieron con frecuencia sometida a Babilonia. Después de una larga lucha contra Asiria, la dinastía caldea se estableció allí en el año 626 a.C.

-los edomitas (1 Macabeos 4,29, 5,65 y Marcos 3,8). Vecinos meridionales de los moabitas y su territorio se extendía principalmente hacia el este del wadi de Arabá, en la Judea meridional, que llegó a llamarse Edom o Idumea. Los Herodes que gobernaban Judea en tiempos neotestamentarios eran edomitas y, junto a los moabitas, su hostilidad a los israelitas trató de impedir su paso a la Tierra Prometida. En el siglo VI a.C., caída ya Jerusalén, dieron origen a los nabateos (árabes). 

Eber tuvo dos hijos: 

-Peleg, que tuvo a Reu y éste a Seruj. Seruj tuvo a Najor y éste a Teraj, padre de Abrahán. Abrahán tuvo con Agar a Ismael, origen de los musulmanes árabes, y con Sara a Isaac, origen de los judíos, cuyo linaje concluirá en la llegada del Mesías Jesucristo. Su ciudad más importante era Ur, lugar de nacimiento de Abraham, cuya genealogía se detalla en Génesis 11. 
Meditación No. 7: “LA VOCACIÓN DE ABRAHAM” (Génesis 12, 1ss) – Soy ...
Los árabes, o ismaelitas, o agarenos se dividían en: 

-los nabateos, habitantes nómadas y seminómadas de la parte norte de la península arábiga, que a partir del siglo III a.C., ocuparon la región al sudeste de Palestina y formaron una floreciente civilización, basada principalmente en el comercio del incienso, con sede en Petra (1 Macabeos 5,25).

-los dedanitas habitaban en Dadán, hoy Al-"Ula, (noroeste de Arabia) hacia el siglo VIII a.C., convirtiéndose en una ruta comercial muy importante (Isaías 21,13 y Jeremías 25,23).

-los mineosnómadas y pastoreshabitaban Asiria y el sur de al-ijaz, a lo largo de la costa del mar Rojo. Su capital era Karma, o Qarnaw, hoy Sadah, en Yemen. Después de su retirada de al-Ula en el siglo I a.C., los nabateos establecieron un centro comercial en Medain Salih, un poco más al norte.

-los madianitas, descendientes directos de Abraham por línea de su hijo Madián (Génesis 25,2 y 1 Crónicas 1,33), adoraban al falso dios Baal, por lo que se le menciona en la Biblia con el apelativo de Baal Peor. Eran vecinos meridionales de los edomitas, y su territorio se extendía hasta Hijaz, en Arabia. Estos seminómadas que montaban camellos constituyeron una amenaza para los israelitas en tiempos de los Jueces. La victoria de Gedeón sobre los madianitas inspiraría a los israelitas durante largas generaciones, convirtiéndose en eterna esperanza para el pueblo de Israel de que aún en tiempos de mayor opresión y peligro, Yahveh, en su infinita misericordia, puede obrar victorias en detrimento de enemigos virtualmente poderosos (Isaías 9,3).

-los moabitashabitaban al este del Mar Muerto (actual Jordania), al sur de Amón y al norte de Edom y eran descendientes de Moab, mencionado en la Biblia como hijo incestuoso de Lot con sus propias hijas, que lo emborracharon al creerse en la obligación de tener relaciones con su padre para perpetuar su descendencia, tras la destrucción de Sodoma y Gomorra. Se caracterizaban por ser incestuosos, homosexuales, libertinos e inmorales.

-Yoctán dominaba el territorio que se extendía desde Mesa hasta Sefar, la montaña oriental,  y fue el origen de los sumerios,"pueblo de cabezas negras", primitivos habitantes de Sumer,  muy dados a la magia, el espiritismo y la idolatría en la parte meridional de Babilonia. 

Aunque los sumerios no se mencionan en la Biblia, el Sinar del Génesis es la contraparte del Sumeru, que designa la tierra de Sumer, y son la primera gran civilización del mundo que habitó en Mesopotamia, entre los ríos Tigris y Éufrates, ubicación del Edén, hacia el año 3,500 a.C.. Posteriormente, darían origen a los babilonios, que les sucedieron en el sur de Mesopotamia. Su capital era Babilonia

Durante el principio del primer milenio a.C. los babilonios estuvieron sometidos a los asirios, pero desde el 612 a.C. hasta el 539 a.C. la dinastía neobabilónica o caldea dominó el Asia Occidental. Nabucodonosor fue el rey más conocido de aquella época (604 al 562 a.C.)

Babilonia fue el lugar donde los judíos sufrieron su segunda deportación en el año 607 a.C., que cayó ante Ciro de Persia en el 539 a.C., quien permitió al pueblo judío su regreso a Israel.

Lud, dio origen a los luditas, mencionados en Isaías 66,19, Jeremías 46,9 y Ezequiel 27,10; 30,5 tribus del norte de África.

Arám, origen de los arameos, pueblo de lengua semítica de cercano parentesco con los israelitas (Deuteronomio 26,5) que se expandió por toda Mesopotamia y Siria durante la última parte del segundo milenio a.C., y  que, a principios del primer milenio a.C., dominaban algunas ciudades-estado sirias, como Damasco, Hamat y CiliciaEl nombre hebreo Aram se traduce habitualmente como Siria, pero el nombre griego Syria es el que aparece en los relatos bíblicos.

martes, 9 de junio de 2020

EQUIPOS DE PROTECCIÓN ESPIRITUAL

"El principal reto de la evangelización de la Iglesia 
es luchar contra la 'apostasía silenciosa' 
y proporcionar a las personas la oportunidad 
de experiencias íntimas de encuentro con Dios."
(Cardenal Robert Sarah)

Antes del Covid, es indudable el hecho de que en todos los ámbitos de nuestra sociedad actual ya existía una pandemia espiritual. El hombre hace mucho que ha decidido que no necesita a Dios y vive de espaldas a Él. Se ha contagiado de un virus apóstata y mortal.

Pero es más preocupante observar cómo este virus ha penetrado con saña dentro de nuestras comunidades parroquiales y las ha devastado, llenándolas de enfermos y víctimas espirituales. 

Bastaría con realizar unos simples tests espirituales masivos en cada comunidad parroquial para encontrar una realidad evidente, un resultado preocupante: "positivo" en apostasía y relativismo. 

Quizás algunos traten de negar la existencia de este virus o de minimizar sus efectos y consecuencias. O quizás quieran falseen las cifras de contagiados o de muertos (espirituales). O quizás nos quieran contar un "relato" que nada tiene que ver con la realidad. Pero, a pesar de todo eso, el resultado no cambiará. El hecho es que nuestras "residencias espirituales" se encuentran llenas de enfermos infectados que transmiten y contagian el virus a todos los que allí conviven. 

Este fatal resultado "positivo" en muchos entornos católicos nos demuestra que nos hallamos ante un perverso germen, sutil e invisible, que va agrediendo, erosionando y destruyendo poco a poco, los pulmones espirituales de la Iglesia. 

Se trata de una lenta, constante y silenciosa apostasía que penetra en la Iglesia imperceptiblemente, sin darnos cuenta, sin saber de dónde o de quién viene el contagio. Sus claros síntomas son "doctrinas" novedosas o interpretaciones "actualizadas" sobre la fe católica, con la única intención de "amoldar" a los cristianos al mundo. 

Nos encontramos ante una ideología disfrazada de "nueva visión" de los principios cristianos y de la doctrina de la Iglesia, difundida de una manera constante por el "Imperio" y sus medios de comunicación propagandista (la Bestia), y que aboga por un hombre sin Dios, un subjetivismo exacerbado y un relativismo agudizado cuyo objetivo inicial es "negociar" la fe, para después, acabar con ella. 

Medidas de protección espiritual

Para contrarrestar este virus apóstata, los cristianos debemos adoptar una serie de medidas de protección espiritual. Y para ello, se me ha ocurrido hacer una analogía con elementos de plena actualidad:

En primer lugar, es urgente desenmascarar este mal, informando a la población católica de una forma clara, rotunda y veraz, del riesgo letal de esta pandemia, que puede conducir a la muerte espiritual, a la destrucción del alma. A la vez,  debemos formarnos en la sana doctrina de la Iglesia, como primer paso en el crecimiento en la fe. 

En segundo lugar, es imprescindible hacer comprender la necesidad de un "confinamiento interior del alma" basado en una intensificación de la oración y el sacrificio, y en un aumento de la lectura y meditación de la Palabra de Dios, para el fortalecimiento y la perseverancia de nuestra vida interior.

En tercer lugar, es preciso dotar a los cristianos de protección espiritual con "equipos de protección individual" (EPI), contra el virus de la falsedad y así, poder ejercer su servicio a Dios y a los demás, sin necesidad de buscar aplausos ni menciones heroicas. 

Hablamos de los sacramentos. Estos EPI espirituales deben estar "homologados" por la Iglesia Católica para garantizar la máxima protección espiritual, de tal forma, que para cada alma es necesario escoger la talla, diseño o tamaño que mejor se adecue a su estado espiritual o a su situación de riesgo de contagio. 
Su reparto comienza por los sacerdotes y el personal pastoral, quienes están en primera línea de batalla y para quienes este agente mortal es una amenaza real, que puede llegar a cercenar toda posibilidad de lucha contra éste; y continúa por el resto de la población de fieles para evitar su posible contaminación o rebrotes infecciosos.

Los EPI espirituales deben administrarse de una manera correcta, según las indicaciones del Fabricante, es decir, según la enseñanza de Cristo, y atendiendo a las distintas características o especificaciones de la Iglesia para cada uno de ellos, con el objeto de evitar posibles vías de entrada del peligroso agente anti-cristiano.

Los EPI espirituales tienen su mayor ventaja en el hecho de que no son desechables y pueden reutilizarse una y otra vez, siempre que sean necesarios y ante cualquier situación de riesgo potencial.

Para conocer cada rasgo específico de cada uno de los distintos EPI, es necesario realizar una breve descripción de los mismos y de su indicación adecuada a un entorno espiritual potencialmente expuesto a la infección. 

La evaluación del riesgo de exposición permitirá precisar la necesidad del tipo de protección más adecuado en cada caso o, preferiblemente, el uso conjunto de todos ellos. 

Mascarillas litúrgicas

Recomendable para todo el personal en general: Con el fin de evitar contagios, los casos confirmados con sintomatología respiratoria y aquellos en investigación, deberán llevar, preferentemente, mascarillas litúrgicas semanales, al menos, todos los domingos. Se trata de una primera medida necesaria de protección. Presentan un 78% de eficacia de filtración mínima y un 22% de fuga hacia el exterior. 
Recomendable para el personal especializado: La protección respiratoria es especialmente indispensable para el personal sanitario especializado (sacerdotes, diáconos, consagrados) y/o para el personal auxiliar (voluntarios, formadores, catequistas, fieles comprometidos, etc.), que puedan estar en contacto a menos de 2 metros de casos en investigación o confirmados, es de una mascarilla litúrgica diaria. Presentan entre un 92 y un 98% de eficacia de filtración mínima, y entre un 8 y un 2% de fuga hacia el exterior. 

Ropa de protección cristiana

La ropa de protección espiritual es el revestimiento de Cristo y está compuesta por la "bata" del bautismo, las "vestiduras blancas" de la comunión eucarística y las "botas" de la confirmación.
Todos ellos tienen un alto grado de resistencia a la penetración de microorganismos pecaminosos, una espesa capa de impermeabilización contra la salpicadura de fluidos malignos y secreciones ateas, a la vez que proporcionan una gran libertad de movimiento gracias a la "Verdad".

Guantes del Espíritu

Los guantes del Espíritu, también llamados dones, son siete: sabiduría, entendimiento, consejo, ciencia, piedad, fortaleza, temor de Dios, a los que se añaden otros tres de apoyo: humildad, servicio y pureza de intención. 
Recomendables para todos y especialmente indicados para los sacerdotes encargados de: 

-actividades de atención y servicio al paciente: dirección espiritual, formación, etc. 

-tareas de laboratorios: grupos y actividades pastorales, catequesis, evangelización, etc. 

-trabajos de limpieza y desinfección, tanto de superficies generales como de espacios concretos, utilizados en la confesión o la unción de enfermos. 

Gafas conyugales/Pantallas de castidad 

Los cristianos casados deben usar la protección ocular del sacramento del matrimonio, compuesto de gafas integrales de amor, mientras que los no casados o separados disponen de pantallas de castidad, cuando haya riesgo de contaminación ocular y/o carnal por salpicaduras o gotas de impureza. 
Se recomienda no tocarse los ojos de la fe con las manos de la injusticia y realizar una higiene intensiva, antes y después de cada uso o acto de caridad, mediante el lavado con agua y jabón, o mediante gel hidro-alcohólico. 

Agua y jabón penitencial/Gel de unción

La exposición constante a la contaminación del pecado de la ropa, los guantes, las gafas o las pantallas requiere, imprescindiblemente, su limpieza y desinfección, mediante el lavado con agua y jabón o gracia santificante mediante el sacramento de la Reconciliación o Penitencia, al menos, una vez al mes, sin menoscabo de hacerlo más regularmente, por ejemplo, semanalmente. 
                              
En caso de estancia en la UCI y con respiración asistida, se recomienda, además, el uso del gel hidro alcohólico o sacramento de unción de enfermos

Cuando sea necesario, puede hacerse un uso conjunto de más de un equipo de protección individual, dado que está asegurada la total compatibilidad entre ellos, y probada su idoneidad conjunta y simultánea. 

Los EPI deben colocarse antes de iniciar cualquier actividad susceptible de causar contaminación, para así, garantizar la protección adecuada en función de la forma y nivel de exposición y que ésta se mantenga durante la realización de toda actividad espiritual. 

Esto debe tenerse en cuenta cuando se colocan los distintos EPI, de tal manera que no interfieran y/o alteren las funciones de protección específicas de cada equipo. En este sentido, deben respetarse siempre y sin excepción las instrucciones del Fabricante. 

Se debe evitar que los EPI sean una fuente de contaminación ulterior, por ejemplo, exponiéndolos, sin vigilancia o con desidia, a superficies infectadas o entornos contagiosos.

Protejámonos contra el virus del pecado y viviremos eternamente.

LA EXÉGESIS DE ORÍGENES: SOMBRA, IMAGEN Y VERDAD

"A la sombra del Antiguo Testamento, 
sucede la imagen de Cristo y de su Iglesia del Nuevo Testamento, 
la cual se consumará en la verdad del Reino en el fin de los tiempos."
(Orígenes)

Reconozco que, para muchos de nosotros, no es costumbre ni muy habitual, conocer o leer a los padres de la Iglesia que, sin embargo, tienen tanto que decirnos y tanto que enseñarnos. Por eso, hoy, quiero adentrarme en la teología de uno de ellos, Orígenes.

Orígenes (Alejandría, 185 - Tiro o Cesárea Marítima, 254 d. C.) es considerado uno de los más grandes conocedores de las Escrituras, padre y exégeta de la Iglesia Católica oriental y, junto con San Agustín y Santo Tomás, uno de los tres pilares de la teología cristiana.  

En su célebre tratado Peri Archôn, o Tratado de los Principios, redactado antes de su partida de Alejandría, hacia los años 220-231, expone las normas de su interpretación de las Sagradas Escrituras con el objetivo de descubrir el significado profundo representado en ellas, su sentido alegórico y espiritual.

Toda su pensamiento gira en torno a la Teología de los tres sentidos o tres planos: sombra, imagen y verdad.  El cristiano, con la lectura de la Escritura, pasa de las sombras, a través de las imágenes, a la verdad.

Toda su gran preocupación está dirigida hacia la necesidad de aplicar un método exegético cristiano, apostólico y eclesial a las Escrituras, dado el carácter divinamente inspirado de la Biblia: “un modo correcto de comprensión, observando la regla y la enseñanza que Jesucristo transmitió a los Apóstoles y que ellos transmitieron por sucesión a su posteridad, los maestros de la Iglesia celeste”
Es en los Proverbios de Salomón, donde encuentra el método para el examen atento de la Sagrada Escritura: “Y tú, escríbelas tres veces con reflexión y conocimiento, para que respondas con palabras de verdad a aquellos que te han interrogado” (Proverbios 22, 20-21). 

A partir de aquí, establece tres sentidos distintos en la Escritura “Tal como el hombre está compuesto de un cuerpo, de un alma y de un espíritu (1 Tesalonicenses 5, 23), así también está compuesta la Sagrada Escritura, dada para la salvación de los hombres por la generosidad de Dios”, que son percibidos respectivamente por tres niveles de lectores: los principiantes, que ven el cuerpo de la Escritura, los avanzados, que ven el alma de la Escritura, y los perfectos, que ven el espíritu de la Escritura (Romanos 7, 14).

Sentido corporal o literal

Es la "sombra", el “sentido histórico” y literal de la Escritura, que aunque siempre es digno de Dios y útil al hombre, no podemos aplicarlo para comprenderla. Por ejemplo, los siete días de la creación no deben ser tomados en sentido propio, sino como expresión de un orden.

Cuando el sentido literal resulta ser imposible, absurdo o falso, es porque se trata de un sentido figurado. No es que sea falso, sino que es incompleto. 

Sentido espiritual o místico

Para Orígenes, cada una de las líneas de la Palabra de Dios contiene un sentido oculto "imagen"que es necesario descubrir y que revela la plena "verdad" a aquellos que son capaces de escucharla:"el Espíritu Santo quiso envolver y ocultar en palabras ordinarias, bajo el velo de una historia y del relato de cosas visibles, misterios secretos... No hay cuerpo sin alma, no hay letra sin espíritu".

La exégesis espiritual de Orígenes consta de tres elementos:

1-Platónico (ideal). Toda la naturaleza visible no es más que el símbolo del mundo invisible y cada individuo tiene su correspondiente, su tipo, su modelo en el ideal.

2-Alegórico (figura). Todos los datos escritos son alegorías de las realidades morales:los árboles del Paraíso son las virtudes; el arca del diluvio es el alma; Agar representa la cultura profana; Sara la Sabiduría, etc. 

Ambos elementos, platónico y alegórico, conforman lo él que llama la "imagen".

3-Anagógico (tipo). Es la esfera superior de la exégesis, donde se halla la Divinidad. Es la interpretación mística y que él denomina la "verdad". Así, por ejemplo:

-La salida de Egipto representa la liberación bautismal.
-El templo de Jerusalén prefigura el Cuerpo de Cristo, la Iglesia.
-La caída de Jericó representa el derrumbamiento del paganismo por la predicación del Evangelio; es la caída de nuestra Jericó interior mediante la conversión a la Palabra de Dios; es en definitiva, la destrucción del Reino de Satanás en la Parusía. 
-La entrada de Josué en Jericó representa la entrada de Cristo en nuestro mundo pecador, su victoria pascual sobre la idolatría, la conquista de nuestra alma, arrancada a los vicios por sus virtudes, para ser conducida de esta manera a la verdad de su triunfo final durante su último día.
-"Caballo" es voz; "levadura", enseñanza; "plata" y "trompeta", palabra; "nubes", santos; "pies", consejo; "pozo", enseñanza; "hilo", castidad; "muslo", comienzo; "vino puro", infortunio; "botella", cuerpo; "secreto" y "tesoro", razón.

Un claro ejemplo de su interpretación mística o espiritual lo encontramos en el paralelismo que hace entre las diez plagas de Egipto y los diez mandamientos, entre la figura de Moisés, que llega portando la vara para castigar a Egipto con las diez plagas y la entrega de los preceptos de la ley de Dios en el Sinaí. 

-Las aguas convertidas en sangre son las falsas doctrinas y las filosofías engañosas.
-Las ranas son los gnosticismos que, con un ritmo vacío y ampuloso, traen al mundo fábulas engañosas. 
-Los mosquitos son las falsas ideologías, que taladran las almas con los aguijones menudos y sutiles de las palabras, y las rodea con tanta astucia que el que es engañado, no ve ni entiende por dónde le han engañado.
-Los tábanos son los placeres del mundo y las pasiones desordenadas.
-La muerte de animales y ganados son los ídolos del mundo que dan culto de idolatría a figuras de animales (Júpiter Ammon= carnero, Anubis=perro, Apis=toro, etc.).
-Las úlceras y picores son las maldades engañosas e infectas: las pústulas son la soberbia hinchada y la vanagloria orgullosa, y los picores, la ira y el furor
-El granizo y los rayos son la corrección divina: granizo para que sean devastados los tiernos brotes de los vicios, y rayos para devorar las espinas y los abrojos del placer y de las pasiones. 
-Las langostas son la inconstancia del hombre y su disidencia consigo mismo. El hombre no puede gobernarse así mismo ni mantener el orden en la tierra, asolando todo a su paso.
-Las tinieblas son la ceguera de espíritu, la oscuridad del error y la tenebrosidad del pecado.
-La muerte de los primogénitos son los que llamamos principados y potestades, herejes que rigen este mundo de tinieblas con sus falsas doctrinas, a los que Cristo con su llegada, expone al desprecio, esto es, los hace cautivos y los derrota en el leño de la cruz.

Sin embargo, sólo la fe nos da la inteligencia, la gnosis de la Escritura y de sus misterios. La exégesis se vuelve aquí contemplación, a través de las palabras de Dios, de su Palabra Única, el Logos, oculto bajo la apariencia de la Letra.

Sentido moral

La exégesis moral de Orígenes la encontramos, sobre todo, en sus homilías y no siempre es posible distinguirla de la espiritual o mística.

Se trata de una interpretación, fundamentalmente alegórica, cuyo propósito es dirigir a los cristianos en su vida moral y de fe. 

Siguiendo el paralelismo de las plagas y los mandamientos, bajo la interpretación moral, Orígenes se refiere a que las almas que están en el error e ignoran la verdad, están en Egipto. Estar en Egipto es estar lejos de Dios.  

Por ello, es necesario enviar plagas, es decir, preceptos, mandamientos. Se trata de un proceso de acercamiento del alma a Dios, a su Ley. Es un proceso purificador que explica el Éxodo del pueblo de Dios, el deambular de Israel por el desierto, lugar de prueba y de encuentro con Dios. Un proceso que nos representa a todos nosotros. 
Cuando las almas que están en Egipto reciben la Ley de Dios: 

-las aguas convertidas en sangre nos enseñan a transformar la vida infiel y lujuriosa pasada por los méritos de la sangre de Cristo.  
-el croar de las ranas nos muestran el estéril y vacío discurso humano y la queja contra la providencia divina. 
-las picaduras de los mosquitos nos indican los malos pensamientos y los aguijones de la carne. 
-los aguijones de los tábanos nos señalan las bajas pasiones.
-la muerte de los animales nos presentan la necedad de la inteligencia humana.
-las úlceras nos manifiestan los pecados de la concupiscencia, los tumores de la arrogancia y el ardor de la ira.
-el granizo y los rayos nos guían para reprimir la lujuria y los placeres con la penitencia
-las langostas nos instruyen a realizar todas las cosas con orden y equilibrio, sin devorarlo todo con movimientos inquietos y agitados
-las tinieblas nos enseñan que, cuando el alma comienza a reconocer el dedo de Dios, ve las tinieblas de sus obras y reconoce la oscuridad de sus errores
-la muerte de los primogénitos nos da a entender que necesitamos destruir todos los movimientos desordenados primarios de nuestra alma.  

Pablo, modelo de interpretación

Orígenes busca en la Escritura la coherencia, no a nivel de la letra, sino a nivel del espíritu y por ello, considera a San Pablo, el máximo apóstol, el maestro de la interpretación bíblica, el modelo de autoridad y justificación de la exégesis espiritual de la Palabra de Dios. 

Afirma que es necesario comparar los mismos términos en diferentes pasajes de la Escritura (1 Corintios 2, 13), pero sólo si se posee el Espíritu que movió al autor o hagiógrafo, es posible comprender sus palabras. 

Tomando como ejemplo la carta de San Pablo a la Iglesia de Roma, afirma que "la Ley es espiritual" (Romanos 7,14), y que sus relatos son alegóricos. Refiriéndose a la carta a la Iglesia de Corinto, afirma que "la letra mata, el espíritu da vida" (2 Corintios 3, 6), es decir, que la comprensión torpe de la Escritura mata la fe, impide creer.

Mencionando la carta a Timoteo, afirma que "toda escritura es útil" (2 Timoteo 3, 16), que todo la Biblia es edificante y beneficiosa para el lector. Pero esa utilidad no se manifiesta de forma inmediata, sino por una convicción de fe que se deduce de la inspiración que hace coherente, relevante y útil la lectura. Por tanto, rechazar algunos pasajes o libros de la Escritura, es negar que es inspirada y que es palabra de Dios, y por tanto, impropio de un cristiano.

Orígenes, como Pablo, afirma que "todo es gracia" y, por tanto, para comprender la Escritura es necesaria pedirla y dejarse guiar por el don del Espíritu, porque acceder a sus misterios no es una simple obra humana. Sólo quien pide la Gracia, la recibe. Y sólo quien la recibe, comprende lo que Dios quiere decirnos.

Exégesis trinitaria

Podríamos concluir que la exégesis de Orígenes es trinitaria: sombra (Padre), imagen (hijo) y verdad (Espíritu Santo).
El Antiguo Testamento habla del Padre, y del Hijo, y del Espíritu. Tanto los patriarcas como los profetas habían tenido ya, aunque imperfecta o velada, la revelación del misterio trinitario, cuando hablan de la Palabra y el Soplo de Dios

La Escritura, considerada de forma global, nos habla de dos formas o condiciones del Verbo encarnado, al mismo tiempo que nos habla de la Trinidad por una parte, y del cosmos angélico, humano y material, por otro. El fin fundamental de la Escritura es la temática cristológica. Tenemos que levantar la "letra" para encontrar la "Verdad", es decir, a Cristo.

Pero la Palabra de Dios es también la manifestación de la “condescendencia” de la divinidad trascendente e inmaterial, respecto de la humanidad hundida en la materia. Condescendencia de la que, la Encarnación del Hijo, con su forma divina, en la forma de esclavo, es el punto culminante.

Para Orígenes, “la historia es el vestido exterior de la profecía". Para él, todo en la Escritura es figura y tipo, y así, los lugares descritos son la figura de los estados espirituales; subir y bajar corresponden a los pasos espirituales; los hermanos de Jesús figuran a las potencias angélicas; la bajada es una figura de la Encarnación donde el Verbo es acompañado por sus hermanos angélicos, que bajan con Él. La historia angélica repite la historia humana.

Orígenes defiende a ultranza la interpretación profunda o espiritual de la Palabra de Dios y critica la exégesis literal, afirmando que, debido a esta interpretación, los judíos rechazan a Jesús y el Nuevo Testamento, los herejes rechazan al Creador y el Antiguo Testamento, los "cristianos simples" ejercen una fe ciega y evitan una lectura profunda de la Escritura y los paganos rechazan tanto el Antiguo Testamento como el Nuevo Testamento.

Todo en Orígenes es sentido místico.